Centenario de la Canonización de Santa Margarita María Alacoque
¡BIENVENIDOS!
A NUESTRA PÁGINA EN CONSTRUCCIÓN
Las Siervas de Santa Margarita María y de los Pobres somos una Congregación nacida del Corazón de Jesús, en los albores del siglo XX, el 13 de octubre de 1901 para aliviar el dolor en la Iglesia sufriente.
Hoy queremos compartir, de manera sencilla, nuestro ser y hacer en el Sagrado Corazón de Jesús, en la Iglesia y para la Iglesia.
Santa Margarita María Alacoque
La fiel discípula y confidente del Corazón de Jesús, ocupa en nuestra Congregación un lugar especial de veneración por ser ella la que inspira con el ejemplo de su vida nuestra adoración a Dios.
Constituciones n. 98
Narra la hermana Eduarda Aguilar, una de las primeras Hermanas:
“Ingresé a la Congregación en 1909 y en una ocasión el Padre nos llamó a todas para que escogiéramos el nombre que queríamos para la Congregación, y unas decían que del Sagrado Corazón, y él observó: -‘Ya hay otras con ese nombre’. Otras, que del Santísimo Sacramento. –‘También hay otras ya’. ‘¿No les parece que le pongamos SIERVAS DE SANTA MARGARITA MARIA Y DE LOS POBRES?’ propuso el Padre y así aceptamos todas que fuera”.
TESTAMENTO ESPIRITUAL
"La humanidad sufre y Dios nos ha enviado para aliviar en todo lo que se pueda ese dolor. No nos llamó para asegurar nuestro bienestar sino para que por medio de nosotras, otras personas logren encontrar su necesidad remediada por alguien de quien lo esperan todo, por creernos cerca de Dios".
Santa María Guadalupe García Zavala.
(Santa Lupita)
Fundadora
"Las quiero a todas santas"
Nuestra Madre Lupita
LEMA DE LAS SIERVAS DE SANTA MARGARITA MARÍA Y DE LOS POBRES
"Caridad hasta el Sacrificio y Constancia hasta la Muerte"
Es el lema que inspiró las obras fundadas por el Siervo de Dios Cipriano Iñiguez Martín del Campo, entre ellas, ésta Familia Religiosa.
La siguiente imagen, que representa el desagravio al Sagrado Corazón de Jesús, forma parte de una serie de dibujos realizados por Nuestro Padre Cipriano para indicar a sus "hijas", en tiempo de persecución, el Itinerario Espiritual y Apostólico que las debe guiar.