Reina de Castilla desde 1474 y reina consorte de Aragón desde 1479 por su matrimonio con Fernando II de Aragón.
Los Reyes Católicos formaban un buen equipo. Aunque el reino de Castilla esto no afectó en su gobierno pues ambos mandaban por igual en sus reinos. Algo inaudito pues en la Edad Media el papel de la mujer era de consorte, sin capacidad de autoridad. Es por esto que se conoce en el refranero popular que «tanto monta, monta tanto, Isabel como Fernando». Su reinado se caracterizó por la centralización del poder, la expansión territorial, la financiación de la expedición de Cristóbal Colón que condujo al Descubrimiento de América en 1492, la conquista del Reino de Granada y la unificación de España bajo una sola monarquía.
Isabel I fue una figura clave en la historia de España y del mundo. Isabel la Católica tenía madera de líder, culta, estudiosa y devota.