Mi obra se compone de esculturas modeladas y piezas hechas a torno, realizadas en arcilla refractaria y gres.

En toda la obra se puede apreciar la búsqueda permanente del equilibrio entre el volumen, la textura y el color.

Con la arcilla refractaria pongo el acento en las posibilidades de la superficie granulosa que tiene esta arcilla, lo que me permite sacar el máximo partido a la textura de la pieza, predominando los tonos ocres de la tierra, el negro de los óxidos y el esmalte blanco.

Contrasta así con la obra realizada en gres donde el volumen y el colorido de los esmaltes, en tonos suaves y satinados, es más variado, quedando la textura en un segundo plano y reforzando el protagonismo del volumen, la forma y el color.