Marcos para Fotos

Cuando empecé a hacer yoga nunca consideré practicar en casa hasta que un maestro comentó casualmente: “Si te da miedo marcos para fotos pararte de cabeza, puedes practicar en casa”.

¿Cómo? Pensé. ¿Hay tarea en yoga? ¿Acaso era algo que tenía que hacer? ¿Me reprobarían si no lo hacía? ¿Y qué se supone que tenía que hacer yo sola en mi tapete? ¿Y cómo iba yo a diseñar una práctica en casa que se comparara con las secuencias que hacíamos en clase? Confundida, ignoré las palabras de mi maestro.

Resulta que yo no era la única con esa clase de dudas. De acuerdo con el maestro de yoga Jason Crandell, el error más común acerca de una práctica en casa, “es pensar que tienes que hacer lo mismo, con la misma intensidad y duración que una clase regular”. “No es así”, nos dice, “esta concepción puede sabotear los esfuerzos de alguien que quiere establecer una práctica en casa”.

“Se puede comparar un poco con el hecho de cocinar”, nos dice Crandell. “Por supuesto que podrías preparar una comida con calidad de restaurant cada cena, pero está bien hacer algo muy simple de vez en cuando”. Con la intención de ayudarte a crear una práctica sencilla que sea especialmente para ti, he redactado algunos puntos que te servirán como guía para vencer los tres obstáculos principales que debemos enfrentar: conformismo (cómo empezar a salir de tu zona de confort y asegurarte de que efectivamente hagas tu práctica en casa); miedo (qué hacer una vez que te comprometas a empezar); y falta de tiempo (cómo incluir el tiempo para tu práctica en una agenda ya de por sí apretada).

4 RAZONES PARA EMPEZAR UNA PRÁCTICA EN CASA

Haz una revisión rápida de los beneficios de establecer una práctica regular en casa para motivarte.

1. AUTOCONOCIMIENTO

“El practicar solo te enseña a conocerte a ti mismo”, nos dice Crandell. “Podríamos usar la comparación entre manejar tu propio auto contra tener un chofer que lo maneje –cuando tú mismo manejas, tienes la responsabilidad de poner atención y elegir a dónde vas y qué hacer conforme vas manejando”.

2. AUTOAYUDA

Entre más practiques, te volverás más sensible a tu estado físico, mental y emocional, así podrás elegir la práctica que pueda equilibrar cualquiera de esos estados.

3. CONSENTIRTE

¿Qué otras cosas te permiten hacer exactamente lo que se te antoje? “El practicar en casa te da la oportunidad de consentirte”, nos dice Crandell. “Puedes practicar desde 2 a 90 minutos y hacer lo que quieras, al ritmo que quieras, del estilo y a la intensidad que tú elijas”.

4. CRECIMIENTO EXPONENCIAL

“Cuando practicas regularmente, las ventajas permanecen en tu cuerpo, no se diluyen en el periodo entre clase y clase” comenta Cyndi Lee, maestra y fundadora de Om Yoga. “Esa consistencia ofrece beneficios que se duplican una y otra vez."

¡Nada mal para algo que puedes hacer en la sala de tu casa sin gastar un centavo! Aunque, margenes para invitaciones de boda por muy grande que sea tu inspiración, tu práctica en casa no se convertirá en realidad si no cuentas con algunas guías que te ayuden a contrarrestar el temor de no estar haciendo bien las cosas.