Estados Unidos continúa enfrentando los efectos del clima extremo, que causa enormes daños y cortes de energía en todo el país. Debido a esta situación los glaciares en Alaska están provocando inundaciones en los ríos que dañan las casas. Además, los estados del sur aprecian récords de registros de calor extremo. 

 Las tormentas de la costa este han causado daños y cortes de energía en áreas como Washington, DC y el norte de Virginia. Las fuertes lluvias provocaron inundaciones en la ciudad de Baltimore y se emitieron advertencias de tornado en Pensilvania, con informes de daños a casas y árboles. 

 Mientras tanto, en Alaska, los glaciares se han derrumbado, el río Mendenhall se ha elevado y las casas han sido destruidas. Se esperan altas temperaturas y fuertes vientos en el sur del país, con más de 300.000 hogares y negocios en varios estados afectados por cortes de energía relacionados estrechamente con la tormenta.

 El Imparcial. (2023, agosto 09)