Pfizer anunció que un nuevo paciente murió durante un ensayo clínico de terapia génica. La muerte, que ocurrió durante un estudio para tratar una enfermedad rara, generó preocupación y destacó los riesgos potenciales asociados con dicho tratamiento. 

 Esta noticia destaca la importancia de un seguimiento y evaluación rigurosa de los ensayos clínicos y la necesidad de garantizar la seguridad y el bienestar de los participantes en las investigaciones médicas. Las muertes de pacientes durante los ensayos clínicos de terapia génica han planteado dudas sobre la seguridad y eficacia de estos tratamientos, particularmente para enfermedades raras con opciones de tratamiento limitadas. 

 El informe también destacó la necesidad de una mayor transparencia y comunicación por parte de las compañías farmacéuticas y los reguladores para informar al público sobre los riesgos asociados con la participación en ensayos clínicos y los posibles efectos secundarios de las nuevas terapias genéticas. La tragedia puede afectar la opinión pública sobre las terapias genéticas y plantear dudas sobre la futura regulación y supervisión de estos procedimientos médicos.

 EL IMPARCIAL. (2024, mayo 08)