Acoso escolar

Yuli Ivanov

El acoso escolar consiste en el maltrato a estudiantes con el fin de humillarlos mediante agresiones físicas o verbales. Generalmente, uno o varios agresores intentan hacerle la vida imposible a una persona, que, casi siempre, suele tener rasgos diferentes a los de sus agresores (extranjero, persona de color, etc.). Suele producirse en distintas partes del centro escolar, como en el baño, los pasillos o el patio, y es difícil de identificar porque la mayoría de las víctimas lo ocultan.

Hay varios tipos de acoso: verbal, psicológico, físico, social, sexual… Sin embargo, en estos tiempos de pandemia, destaca el ciberacoso. Este tipo en concreto se suele producir en las redes sociales, con mensajes o, incluso, llamadas anónimas y en los últimos años se está viendo agravado por el mal uso de las tecnologías. Muchos niños tienen móvil a los 9 años e, incluso, tienen instaladas las redes sociales que, normalmente utilizan los mayores. Esto provoca que muchas veces estén más pendientes de lo que pasa en el mundo virtual que en el real, y se sientan afectados por cualquier comentario. Y es que, si no se hace un buen uso, cuanto más avanza la tecnología peor se vuelven las situaciones de acoso.

No obstante, la tecnología también ha inventado nuevas formas para intentar parar el acoso. Así, se han creado sistemas de prevención o programas como el método KiVa en Finlandia. En España, aunque no tan específica, la aplicación Alertcops permite comunicar toda clase de delitos de odio.

Pese a esto, en mi opinión, lo más importante es trabajar en uno mismo, sin hacer caso a lo que digan los demás, confiar más en ti mismo y educar en el respeto.

Todavía existen niños que se ríen de las personas discapacitadas o que se creen superiores a los demás, y gran parte de la culpa la tienen los adultos. Para educar a un niño hace falta comunicación y el primer valor que se debe enseñar es el RESPETO. Mucha gente se piensa que estas situaciones de acoso son una exageración, que son cosas de niños, pero muchos niños han llegado a suicidarse por culpa de estos comentarios negativos o por la violencia física que han sufrido. Todos nos sorprendemos cuando en las noticias nos cuentan situaciones de este tipo, pero ¿creéis que la mayoría de las personas hacen algo por parar el acoso? La mayoría de los adultos, que son los que deberían ayudar, piensan solo en sí mismos y hacen comentarios como “con que no le pase nada a mi hijo/a” o “seguro que se lo inventan”.

Muchos famosos como Jesús Vázquez, Manel Navarro o el grupo Sweet California, se han suscrito a campañas antibullying; e, incluso, muchos de ellos han confesado haber sufrido acoso como es el caso de Demi Lovato o Megan Fox.

Si quieres ayudar y conoces algún caso de acoso, ya sea escolar, domiciliario o de cualquier otro tipo, no dudes en llamar a la policía o buscar ayuda, tal vez algún día seas tu quien la necesites y alguien te tenderá la mano en ese momento.


Y tú, ¿quieres poner fin al acoso?