Hay una quinta dimensión más allá de las que conocemos. Es una dimensión tan vasta como el espacio e intemporal como el infinito. Es una zona intermedia entre la luz y la sombra, entre la ciencia y la superstición, que yace entre el abismo de nuestros miedos y la cúspide de nuestro conocimiento. Es la dimensión de la imaginación y se encuentra en un lugar que llamamos videojuegos.