Domingo XIII del tiempo ordinario 2020

Lectura del santo evangelio según san Mateo (10,37-42):

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus apóstoles:

«El que quiere a su padre o a su madre más que a mí, no es digno de mí; el que quiere a su hijo o a su hija más que a mí, no es digno de mí; y el que no carga con su cruz y me sigue, no es digno de mí.

El que encuentre su vida la perderá, y el que pierda su vida por mí, la encontrará. El que os recibe a vosotros, me recibe a mí, y el que me recibe, recibe al que me ha enviado; el que recibe a un profeta porque es profeta, tendrá recompensa de profeta; y el que recibe a un justo porque es justo, tendrá recompensa de justo.

El que dé a beber, aunque no sea más que un vaso de agua fresca, a uno de estos pequeños, solo porque es mi discípulo, en verdad os digo que no perderá su recompensa».

Es importante estar dispuesto a ayudar a los demás, con alegría, pero esto solo es posible si tenemos el mismo corazón que Jesús, si nos dejamos llenar por su Vida, por sus mismos sentimientos.... por esto es importante ir cada domingo a celebrar la Santa Misa: allí, al recibir su Cuerpo, estamos recibiendo también parte de su mismo corazón.


Esta semana tienes que estar alerta, busca a quiénes puedes ayudar pensando en Jesús....

COLOREA


Este Evangelio nos habla también de lo que es la FE.


Cuando tienes mucho interés en algo, luchas para poder conseguirlo, intentando vencer todas las dificultades.


La FE en Jesús, creer que Jesús es el Señor, Hijo de Dios, también supone que comportarnos como Él ha de ser nuestra gran prioridad, con su ayuda es muy fácil, solo tenemos que pedírselo con fuerza.