E r a s m u s
mi experiencia
mi experiencia
Leticia De Croce CF GS Administración y Finanzas 2022-2024
Bienvenido, bienvenida
Este es mi blog de mi experiencia de Erasmus en Alemania haciendo prácticas en el departamento contable de una empresa hotelera. Toda una aventura que he tenido la suerte de poder vivir.
Mi llegada a Berlín no ha podido ser más acogedora. Desde el primer momento el personal, que consideré mis compañeros en muy poco tiempo, me hicieron sentir muy bien recibida y acompañada.
Tengo la suerte en hospedarme en uno de los hoteles de la compañía por lo que, aunque tenga una habitación asignada y pueda tener requerimientos "como cualqueir huésped", todos me presentaron como una nueva compañera e integrante de la empresa.
Probablemente debido a la emoción, me desperté temprano, al rededor de la 6:30 y me encontraba desayunando antes de las 8 h.
El clima se notaba frío pero por suerte pasaba algo de sol antre algunas nubes por lo que pude salir a dar un paseo.
Lo primero que quise hacer fue visitar el hotel donde empezaría mis prácticas que se encuentra muy cerca del que me estaré hospedando las primeras semanas.
Una vez allí simplemente caminé sin rumbo paseando a la vez que investigando los alrededores de la zona, la calle estaba tranquila.
Domingo, 17 de marzo de 2024
Me encanta la arquitectura de la ciudad, los edificios son enormes, las calles anchas y la mejor parte para mí, mucho verde.
Una vez fuera de la estación decidí seguir caminando por la zona sin seguir una ruta específica.
Seguí el camino que marcaba el canal y sin saberlo, llegué al "Reichstag building".
Reichtag Building
Justo enfrente, a cada lado del canal "La casa de Maria Elisabeth Lüders (a la derecha) y la Paul-Löbe-Hauss.
Continuo el camino marcado por el canal. Este bordea el Spreebogenpark, pasa por delante del La Haus der Kulturen der Welt y continúa el paisaje rodeado de verde.
Alemania es reconocida, entre muchas otras, por sus grandes paisajes verdes y frondosos bosques por doquier y esto es, particularmente, lo que más me gusta de este destino por lo que no pude evitar sumergirme en el primero que encontré.
En la misma dirección me encontré con una de las tantas paradas icónicas de la capital, the Victory Column, conocida también como "Siegessäule".
Es un de los monumentos más emblemáticos de Berlín construido entre 1864 y 1873 para conmemorar las victorias militares de Prusia en la guerra contra Dinamarca, Austria y Francia y la unificación alemana.
Es una estructura francamente impresionante de 67 metros de altura con una estatua de bronce dorado de la diosa de la victoria (Goldelse).
Se puede acceder a ella por un precio muy económico. En lo que sería la planta baja hay una zona a modo de exposición de maquetas de diferentes monumentos.
La primera salida al exterior desde que uno decide empezar a subir por el interior del edificio es la base donde se asienta la columna. Una estructura impresionante con grandes columnas de granito que rodean la columna.
El centro está decorado con un mosaico que representa la victoria de prusiana sobre Francia y la proclamación del imperio en Versalles.
Es un mosaico impresionante, digno de observar con detenimiento.
Si deciden seguir subiendo los 285 escalones, se puede acceder a la parte superior del monumento y apreciar una bellísima vista panorámica de la ciudad.
Es una experiencia, personalmente, para repetir.
Para terminar el recorrido antes de volver al hotel me paré a almorzar en un restaurante muy acogedor y con mucho encanto.
Otra de las suertes que he tenido en la experiencia es que el establecimiento en el que se desarrollan mis prácticas está muy bien situado. Tanto es así que este día en el que aún disponía de unas horas de sol, tuve la posibilidad de dar un buen paseo por el centro, sin saber que me encontraba rodeada de tantos edificios emblemáticos como los que os dejo a continuación.
Vistas desde uno de los puentes que cruza el canal justo delante del hotel.
Al fondo la TV Tower, ubicada en Alexander Platz, otro punto de referencia de la ciudad y a su derecha el Bode Museum.
Algo de lo que me enteré con posterioridad, es que la zona es llamad a "La isla de los Museos", de ahí la gran cantidad que me fui encontrando durante el paseo.
Continuando el camino que marca el canal, acercándome hacia los grandes edificios que se ven desde el otro lado, me encuentro con La Alte Nationalgalerie.
Esta es una de las galerías de arte más emblemáticas de la ciudad. Una parada imprescindible.
La inmensidad del edificio que se encuentra justo enfrente de la galería te obliga a ir a conocerlo.
Se trata, ni más ni menos, que de la Catedral de Berlín.
Esta está situada delante de una gran plaza y a su izquierda, sorpresa, otro museo. El Altes Museo (o museo antiguo), de nuevo, una edificación enorme que, como mínimo impone por su diseño y tamaño.
En definitiva, fui tan afortunada de sorprenderme con cada uno de los edificios que me encontré durante el paseo y presencié desde el centro lo que fue mi primer atardecer en Berlín.
El primer sábado que amanecí en Berlín empezó, por sorpresa para nadie, lloviendo, algo a lo que poco a poco me he ido acostumbrando.
Mis compañeros me habían recomendado visitar Postdam, una ciudad vecina al suroeste de Berlín.
Fui tan afortunada, de nuevo, de que el cielo se despejara y me dedicara unas horas de sol brillante que me acompañarían a lo largo de mi excursión.
Si plan ni ruta programada, paseo por el centro próximo a la estación de tren donde me voy encontrando con diferentes plazas, iglesias, monumentos...
Se respiraba un ambiente de paz y tranquilidad reconfortante.
La estética predominante me recordaba en su mayoría a una seria de televisión ambientada en una etapa clásica.
Estando ya allí, decido caminar en dirección al Palacio de Charlottenhof sin tener ni idea de lo que me iba a encontrar.
Me acompañó la lluvia durante parte del trayecto pero por suerte no decidí dar media vuelta, además, el camino, como os podéis imaginar, era precioso también.
Es difícil describir lo grata que fue la sorpresa que me llevé al llegar a la ubicación que marqué en el mapa. Lo recuerdo con gracia porque mientras caminaba bajo la lluvia que llegó a ser un tanto intensa por momentos llegué a pensar "ya puede ser bonito el Palacio de la Sra Charlotte".
Me encontré con la entrada de un recinto que me cautivó desde el minuto 0.
Sin saberlo había llegado al parque de Sanssouci. Lo bueno de la improvisación (con la que no solía experimentar) es que la sorpresa y gratificación que uno experimenta cuando las cosas salen bien es realmente reconfortante.
El parque de Sansouci, a propósito, considerado Patrimonio de la Humanidad, es un recinto de, ni más ni menos que 289 hectáreas (se hace difícil imaginar su inmensidad).
Es famoso por sus jardines y encantadores senderos que te llevan a diferentes palacios que alberga su interior.
Para mí, que amo la naturaleza y estoy descubriendo lo que me apasiona la arquitectura, fue sin duda la experiencia más gratificante hasta el momento
Entre muchos otros, se encuentra en él el edificio que le da nombre al parque, el Palacio de Sanssouci, construido en el siglo XVIII como residencia de verano para el rey Federico II de Prusia, conocido como Federico el Grande.
Es un edificio que me dejó tan impresionada (de nuevo) que me resulta muy complicado describirlo, pues es tan grande su tamaño estando cada rincón repleto de detalles que quitan el hipo.
Por si no fuera suficiente, detrás del Palacio continuaban las sorpresas con los edificios como la Universidad de Postdam.
Christian, el jefe del departamento y mentor organizó una actividad de ocio para compartir después de la jornada de trabajo. En concreto nos comentó que la idea era pasar un buen rato y eso hicimos.
La actividad consistió en ir a pasar la tarde a un bar que pertenecía a un hostal muy moderno. La gracia de este es que contaba con diferentes mesas de juegos muy divertidos.
Pasamos muy buen rato, bromeamos, reímos y entramos un poco más en confianza fuera del ambiente laboral.
De estas dos semanas me quedo sin duda con la suerte que he tenido al conocer a los compañeros del Hotel INNSiDE. En especial he creado una relación preciosa con Anna a la que le tengo muchísimo aprecio así como a su pareja Enea. Juntos hemos compartido días de mucha diversión en los que me hicieron que me sintiera acogida y querida, como en un hogar.
La experiencia intercultural que se puede experimentar en Berlín es impresionante. La ciudad es bellísima, está repleta de monumentos e historia difícil de conocer en su totalidad debido a su gran cantidad.
Algo que también es nuevo y puede resultar chocante son las distancias, sobretodo teniendo en cuenta el tamaño de nuestra isla.
En la oficina he aprendido mucho de la organización y dinámica de una gran empresa, algo que también resulta totalmente nuevo para mí. Todos los departamentos tienen comunicación como mínimo regular entre ellos lo que permite que todos los procesos estén totalmente controlados así como el constante análisis de procedimientos e incidentes a la vez que se proponen soluciones en común y se establecen fechas límites y reuniones de seguimiento.
Sin duda el mayor “handicap” de la experiencia es el idioma. El alemán es totalmente diferente a todo lo que había aprendido antes, o al menos así lo he sentido durante estos días. Aún así he tenido la suerte con topar primero con personas que se encontraron en una situación similar a la mía anteriormente y pusieron su empeño en intentar ayudarme y desde luego lo consiguieron aunque me queda un gran camino por delante para adquirir un nivel básico, algo que sin duda es algo que me propongo debido a la cantidad de oportunidades que trae consigo.
He tenido la suerte de poder pasear y recorrer diferentes lugares, monumentos, centro urbano así como parques y algún evento social. Esta cuidad está llena de oportunidades de todo tipo.
Una vez escuché a un guía que Berlín era la capital del mundo, donde se encontraban gran cantidad de nacionalidades y culturas y además viven, aparentemente, en paz y nutriéndose las unas de las otras. Después de estas semanas, no puedo estar más de acuerdo de ello.
April 1st 2024
Me ha tocado decir adiós a las personas que me habían acompañado y acogido durante estas dos semanas y puede parecer exagerado pero, después de haber pasado por los primeros días de adaptación y ser consciente de que había tenido mucha suerte de haberme encontrado a estas personas, volver a irme fue algo difícil de afrontar en un primer momento.
Desde que puse un pie en Leipzig ya me di cuenta que estábamos hablando de un ambiente totalmente diferente, pues pese a ser un ciudad que recibe muchas personas de visita, parece estar mucho menos explotada, hay menos afluencia intercultural y el entorno es sí es diferente
El hotel, al igual que todos los de la cadena, está ubicado en una zona muy estratégica pues se encuentra en frente de lo que parece área más turística de la ciudad.
En cuanto al ambiente de la empresa, hablamos de un hotel con una menor cantidad de personal por lo que, aunque la organización y las tareas son similares a las experimentadas en el Melia Berlín, el ambiente es mucho más tranquilo.
Cada mañana se realiza una reunión entre todos los departamentos en los que se comparten la información relevante del día anterior, como la ocupación y los ingresos obtenidos así como la previsión para el día de hoy por parte del departamento de housekeeping, por ejemplo.
En mi primer día de prácticas pasé parte de la mañana con el manager de housekeeping y la otra parte con los compañeros en recepción para obtener así una idea global de las actividades diarias de estos departamentos que son tan importantes para la actividad del hotel.
El segundo día ya estuve toda la mañana en el departamento de contabilidad realizando las tareas diarias de control. Control del dinero en efectivo de recepción, bar y restaurante, cobro con tarjetas de crédito y otras operaciones de las que hay que tener un registro diario.
Dentro de todo lo que conlleva esta gran experiencia, la mayor parte del día la dedico en la empresa. Mi departamento es el de contabilidad aunque al ser la oficina un espacio diáfano compartimos el espacio con compañeros de otros departamentos.
El equipo está muy integrado y exite una comunicación muy fluída.
Cada mañana se realiza una reunión con los responsables de cada departamento en los que se comparten la información más importante del anterior. En nuestro caso nos toca preparar un informe con los diferentes ingresos obtenidos
Horas más tarde tenemos nuestro descanso que es el tiempo de comer en la cantina destinada al personal.
Lobby del hotel
Vistas desde la terraza del bar
A Leipzig la definen, entre otras, como la ciudad del arte y la música. Aún no he decubierto a fondo por qué pero lo que sí puedo asegurar es que la estética y su arquitectura parece de un cuento antiguo.
El hotel, como de costumbre, muy bien ubicado, se encuentra rodeado de las edificaciones más importantes del centro.
Entre ellas se encuentran:
El antiguo ayuntamiento donde justo delante se realiza habitualmente un mercadillo pues era zona de intercambio de mercancías en la época. Justo debajo de lo que es este espacio se encuentra una de las paradas de metro de la ciudad.
El ayuntamiento hace de punto de referencia del centro, las calles que lo cruzan están repletas de negocios por lo que es una zona muy concurrida por turistas. A pocas calles del Ayuntamiento se encuentra la Iglesia de St. Tomás, otro punto de referencia de la ciudad y justo enfrente de esta está ubicado el hotel por lo que soy tan afortunada de poder verla cada día.
También es una ciudad en la que se encuentran muchos estudiantes. La universidad de Leipzig se encuentra también en el centro.
Johnannpark, otro parque público a pocos minutos del hotel. Es un lugar ideal para disfrutar del aire libre con grandes esplanadas para descansar, leer o hacer picnics, actividades usuales entre los residentes de la ciudad.
Se respira un ambiente de paz y serenidad entre la naturaleza.
Destaca el lago que se encuentra en el centro del parque. Lo convierte en un lugar muy pintoresco y relajante donde a demás se puede disfrutar de ver los patos que se encuentran en él.
Markkleeberg es un ciudad situada en el sur del distrito de Leipzig.
Es una zona digna de visitar. A pocos minutos en metro del centro de Leipzig, Markkleeberg es una zona muy visitada por turistas.
Además de ser encantadora por sus calles verdes y la estética de sus viviendas, en la ciudad se encuentra lo que sería su atracción más importante, el Cospuden Lake. Es un lago artificial en el que, además de practicar deportes acuáticos y nadar, hace de punto de encuentro para familia y amigos en un ambiente en el que disfrutar de los días de sol y naturaleza.
Otro pequeño parque de la zona céntrica de la ciudad.
El parque Rosenthal es uno de los más populares de la ciudad y ocupa la mayor superficie de césped.
Con posibilidad de recorrer variedad de rutas de senderismo o disfrutar del buen clima en el césped
Este día sábado en el que el clima no pudo ser más benévolo, tuve la oportunidad de visitar una de las ciudades vecinas de la región de Sajonia, Dresden.
A tan solo una hora y media en tren, Dresden es conocida por ser una ciudad que combina historia, cultura, arte y belleza natural.
Durante la Segunda Guerra Mundial su centro histórico fue muy bombardeado, quedando la gran parte destruido. Por ello, estas estructuras que muchas fueron reconstruidas representan tanto para su identidad.
Sábado 27 de abril de 2024
A tan solo a hora y media en tren desde Leipzig, es una escapada perfecta para ver los monumentos más importantes de la ciudad y quedar fascinados con su arquitectura.
Parada imprescindible de la ciudad, es un complejo de palacios y jardines. Fue construido entre el 1710 y 1728 con diseño barroco, está repleto de esculturas y decoraciones fascinantes en toda la construcción.
La entrada al recito y patios interiores es gratuita teniendo la posibilidad de entrar a las diferentes exposiciones de arte en los museos que se encuentran dentro
Desafortunadamente, me tocó una época en la que los jardines se encontraban cerrados para el público pero aún así pude ver el interior del palacio.
Mural de 102 metros, considerado el mural de azulejos más grande del mundo. Significa "Desfile de los Príncipes" y representa una procesión de figuras históricas masculinas (reyes, príncipes, duques) y otras personalidades importantes para la región.
Edificio de la Ópera Estatal de Sajonia, es uno de los teatros más importantes de Alemania y otro símbolo de la cultura de Dresde.
En lo alto de la entrada principal hay una gran escultura de Apolo.
Monumento destacado de la ciudad, lo utilizan como símbolo de la misma en diversas ocasiones, es la "Iglesia de Nuestra Señora".
Durante la Guerra Fría se mantuvieron sus ruinas como monumento de devastación de la guerra. El proyecto de reconstrucción se completó en el 2005.
Hoy en día puede accederse al interior para ver, durante la subida a la cúpula el interior de la misma y una vez arriba las vistas impresionantes de la ciudad.
En conclusión, una escapada enriquecedora que sin duda me encantaría repetir. Además de visitar los monumentos se puede caminar por al lado del rio Elba que cruza la ciudad y tener una vista diferente.
Y aquí yo, más feliz que una perdiz después de haber visto tantos sitios bonitos en una sola mañana.
Aprovechando el festivo nacional del 9 de mayo y que el departamento decidió escoger el día 10 como puente, planifiqué una escapada express a ni más ni menos que Praga.
Compré mis tickets del tren para salir a primera hora del día 9 y volver lo más tarde posible el día 10 así pude estar casi casi dos días completos.
Salí a las 7 am de Leipzig y llegué justo a tiempo para empezar una ruta por la ciudad con el tour que había reservado. Se trataba de un tour de 8 horas aproximadamente el cual nos llevó por cuatro de los cinco barrios de la ciudad y visitando las zonas más importantes. En lo personal (y como era de esperar) quedé fascinada con cada rincón así como con su historia.
Catedral de San Vito
Puente de Carlos IV
Reloj astronómico
Obecní Dum
Barrio de las embajadas
Ständetheater
Una vez finalizada la ruta no hubo mejor plan que subir a uno de los miradores cercanos al centro y contemplar las vistas de la ciudad antes del atardecer.
Al día siguiente, aunque no tenía una actividad programada, dejé mi habitación bien pronto para recorrer un poco más la ciudad.
Volví a algunos lugares a los que habíamos ido el día anterior para verlos con detenimiento y antes de que la ciudad despertara ya que a penas pasadas las 6 de la mañana estaba saliendo por la puerta de la habitación.
Únicamente volví a la habitación para recoger mis cosas y realizar el chek-out a las 11. Así continué el paseo hasta las 18:30 h que salía mi tren de vuelta a Leipzig.
Aquél día caminé unos 20 kilómetros (más que durante el tour) y subí en altura unas 33 plantas según los datos recogidos por mi teléfono, todo un orgullo para ser sincera 😌
Me quedé completamente enamorada de la ciudad, su historia y arquitectura. Es un destino al que deseo volver y ver con más calma así como más zonas alrededor del centro.
Sin duda, fue una experiencia ideal para despedir esta etapa en Leipzig ya que al día siguiente tuve que volver a abandonar el sitio en el que estaba y partir nuevamente hacia Berlín.
Casi me había olvidado de la energía que exige esta ciudad.
Muy contenta de haber vuelto y ver a los compañeros y compañeras que pensaba que no volvería a ver durante el proyecto.
La primera semana de vuelta estuvo llena de actividad
Lunes 13 de mayo
Vuelta a la empresa. Durante la mañana nuestra encargada de logística, con intención de dar una alegría al personal, cosa que consiguió, hizo un paseo por toda la oficina trayéndonos una porción de helado.
Esa misma tarde visito la biblioteca estatal de Berlín
Martes 14 de mayo
Después de la jornada pasé la tarde con mis compañeros. Fuimos a merendar, cenar y dar un paseo por un parque precioso.
Como guinda del pastel, me llevaron a ver el atardecer desde un mirador muy cerca del centro de la ciudad.
Jueves 16 de mayo
Actividad team building, nuevamente, el departamento organizó una salida similar a la de la vez anterior. Esta vez en otro local pero para jugar al mismo juego en el que nos divertimos tanto.
Viernes 17 de mayo
Visita Carnaval de Cultura. Un evento muy importante en Berlín. Se trata de una feria muy grande, con diversidad de puestos de comida, artesanías, escenarios... Una exposición de las diferentes culturas que conviven aquí.
Berlín en su estado puro
Sábado 18 de mayo
Aprovechando para hacer algunos recados, visité uno de los callejones de la zona urbana más famosa de la zona.
Lunes 21 - viernes 24 de mayo
Una de las personas responsables de nuestro departamento, me propuso ir a pasar unos días a Düsseldorf, donde se encuentran las oficinas centrales del centro de operaciones de Alemania.
La idea principal era la oportunidad de conocer la otra parte del equipo con la que trabajábamos de forma remota y tener la posibilidad de pasear por la ciudad.
Como era de esperar, fui muy bien recibida por el equipo. Durante estos días seguí trabajando para el hotel de Berlin de forma remota y por las tardes que me lo permitió el clima, aproveche para pasear por la ciudad.
27 de mayo - 14 de junio