El estudio de la estructura e identificación de compuestos orgánicos e inorgánicos puede abordar unas series de problemáticas como son la procedencia del ámbar, el análisis para la identificación de residuos en objetos líticos, la composición de incrustaciones en cerámica, la caracterización de la cristalinidad de hueso y de madera, Identificación de pigmentos y capas pictóricas. Debajo se presentan algunos ejemplos de las aplicaciones que se pueden abordar.
Análisis de la procedencia de ámbar
La caracterización del ámbar u objetos antiguos elaborados con esta resina fósil permite reconstruir los patrones de asentamientos y recomponer los sistemas de intercambio de este prestigioso y raro material (Truica et al. 2012).
Identificación de residuos en objetos líticos
El análisis de micro-residuos que se encuentran en los objetos líticos como puntas de lanzas o utensilio para cortar se emplea para identificar residuos de animales (grasa, colágeno, hueso). En general, esta aplicación, puede resultar interesante para la identificación de objetos empleados para la caza y para el procesado de las carcasas (Prinsloo et al., 2014).
Identificación del estado de conservación de la madera
La madera de origen arqueológico está expuesta a una lenta degradación y la identificación de su estado de conservación es determinante para emplear un método de restauración y conservación adecuada. La identificación de las características físico-químico de la madera con la estimación de los contenidos de lignina, la celulosa y la estimación del estado de conservación de la estructura cristalina de la celulosa permite rápidamente identificar el grado de conservación de la madera (Sandak et al. 2010).