Consiste en el conteo de los elementos celulares de la sangre como son:
Glóbulos rojos o eritrocitos (transportan el oxígeno).
Glóbulos blancos o leucocitos (combaten las infecciones).
Plaquetas que son fragmentos de células que ayudan a la producción de coágulos sanguíneos.
Este análisis de sangre permite a su médico:
Controlar su salud general.
Diagnosticar una enfermedad.
Controlar una enfermedad.
Supervisar un tratamiento médico.
Antes de realizar cualquier examen clínico, debe hablar con su médico para recibir la orientación adecuada para realizarlo de manera efectiva.
Si solamente se va a realizar este examen, puede comer y beber con normalidad antes del análisis.
Si se va a realizar otros análisis junto a este, es posible que deba ayunar durante un cierto tiempo antes de la prueba, su médico le orientará.
Con esta simple prueba se pueden diagnosticar múltiples patologías que van desde una:
Anemia (déficit de glóbulos rojos).
Leucemia (proliferación excesiva de leucocitos).
Infecciones víricas o bacterianas.
Factores de coagulación.
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