Separadores de grasas | HISPALHIDRO

¿Qué es un separador de grasas?

Las grasas son compuestos orgánicos de origen vegetal y animal con densidades < 0,95 g/cm3 y que son parcial o totalmente insolubles en agua y saponificables.

El separador de grasas según normativa UNE EN 1825 es un equipo diseñado con la función de separar y retener las grasas (animales y vegetales) que pudieran llevar las aguas residuales grises (no negras - fecales) susceptibles de contaminación (las procedentes de cocinas y fregaderos de bares y restaurantes, de la industria alimentaria, etc)

En el separador de grasas nos encontraremos dos tipos de residuos: unos lodos decantados y unas grasas separadas por flotación (trampa de grasas); entre los lodos y las grasas existirá una fase de agua, que tendrá impurezas (sucia) pero estará ya desgrasada. Desde esta fase agua, mediante una tubería sifónica, se realizará la descarga al exterior.

¿Cómo funcionan los separadores de grasas?

Funcionamiento del separador de grasas

El funcionamiento del separador de grasas es por gravedad y tiempo de retención, aprovecha que las grasas son de densidad inferior al agua, e insolubles en ésta, por lo que quedan separadas en flotación.

Las aguas residuales llegan al separador de grasas: los residuos orgánicos e inorgánicos arrastrados (biodegradables o no) de mayor densidad que el agua se separarán por decantación formando unos lodos, y los residuos más ligeros: aceites y grasas, se separarán por flotación.

El agua, ya desgrasada, es evacuada al exterior por una tubería sifónica (en forma de "T"), desde la zona intermedia de la cuba del separador, con lo que evitamos la descarga de las grasas y sobrenadantes ya separados en flotación.

¿Para qué sirven los separadores de grasas?

Las aguas residuales procedentes de las cocinas (fregaderos, lavavajillas, etc) están cargadas de aceites y grasas y son el origen de muchos de los depósitos sólidos que originan atascos por obstrucción de las canalizaciones de las redes de saneamiento, generando grandes gastos en mantenimiento y averías. Estas grasas también perturban el buen funcionamiento de las estaciones de depuración (depuradoras EDAR)

Con la instalación de un separador de grasas conseguimos retener una gran parte de los residuos grasos que contienen las aguas residuales y de otros residuos que pudieran arrastrar, evitando así los posibles atascos por obstrucción de las redes.

¿Dónde se usan?

La hostelería: bares y restaurantes, asadores, comedores (empresas, colegios), catering en general.

La industria alimentaria: cárnicas, mataderos, salas de despiece, embutidos, queserías y derivados lácteos, pescados y pescaderías, elaboración de precocinados, pastelerías y panaderías, etc.

La estanqueidad a olores

Separador de grasas con cierre estanco a olores

La estanqueidad a olores es una característica muy importante a considerar a la hora de elegir un separador de grasas, muy a tener en cuenta cuando la instalación se va a realizar en el interior de locales.

En la descomposición de las grasas y otros residuos orgánicos que se irán acumulando en el interior del separador de grasas se generarán gases de olores desagradables, que de escapar al exterior, pudieran llegar a afectar al confort e imagen del establecimiento.

Ejemplos de tapa con cierre estanco a olores: separador de grasas bajo fregadero y gama Sphère.