Concierto de Navidad - 2014

Señoras, Señores... Muy buenas tardes. En nombre de mis compañeros y de todos los que hacemos posible este concierto de hoy, tengo el honor y el gozo de saludarles muy cordialmente, darles nuestra más afectuosa y entrañable bienvenida y agradecerles, por adelantado, su compañía, al mismo tiempo que les hacemos llegar nuestros mejores deseos de alegría, paz y felicidad para estas fiestas de Navidad. Qué les parece nuestro Orfeó Balaguerí? Ha cambiado verdad? Así de entrada, se puede decir que luce bastante, no creen? Afortunadamente hay muchas caras nuevas. Nos han pasado tantas cosas estos últimos meses que les pedimos disculpas si nos alargamos un poco más, pero queriamos aprovechar la ocasión para explicárselas a todos Ustedes. Dicen que “La vida solo puede enterderse mirando hacia el pasado, y solo se puede ver mirando hacia el futuro”. Una reflexión que nos lleva a nuestro pasado más cercano... el concierto de fin de curso 2013 - 2014 y a los últimos meses, los del otoño de este año. Al finalizar el concierto de fin de curso, el junio pasado, hablábamos del 93° aniversario del orfeón y comentábamos que nuestra voluntad era alcanzar, no sólo el centenario, sinó celebrar muchos años más, y que para ello era necesario emprender una buena renovación... Si recuerdan, los que estaban, ya tuvimos ocasión de presentarles a la persona que tenía que ser nuestra directora, Sílvia, que gentilmente quiso cantar con nosotros en ese concierto... Aquel día empezó nuestro futuro...

Pero aún dentro de nuestro pasado más cercano, como han sido estos últimos meses, desde el verano hasta hoy, hemos recordado aquello que alguien también dijo, que “Los signos de la sabiduría y de la grandeza son la humildad, el agradecimiento y la generosidad”

Estas verdades se nos han hecho bien manifiestas al ver de lo que ha sido capaz Enriqueta. Y no sólo nos referimos a la labor ingente, silenciosa y constante de más de 47 años, al frente de la direcció musical del orfeón infantil primero y del Orfeó Balaguerí después, sinó también por la generosa donación que en estos meses nos ha mostrado al ayudar a convertir en realidad el recambio generacional que necesitábamos, con la savia vivificante de nuevos cantantes y sobre todo, de la nueva dirección. Verla ahora, como una cantante más, como uno de los pilares de las sopranos, haciendo piña con todos nosotros, ha sido para todos una lección de humildad, de agradecimiento y de generosidad que la honra y en la que leemos sabiduría y grandeza. Enriqueta, nadie como nosotros los cantantes, puede agradecerte lo que has hecho y continúas haciendo por el bien de nuestro querido Orfeó Balaguerí. En nombre de todos, y de todo corazón... Muchas, muchísimas gracias.

Gracias que hacemos extensivas a Rdo. Jordi Profitós. De Jordi tenemos que decir casi lo mismo, este año ha dejado la dura tarea de Presidente, después de más de 17 años al frente del Orfeó y naturalmente, como no podía ser de otra forma, continúa con nosotros cantando como siempre ha venido haciéndo. Jordi, a ti también de parte de todos nosotros muchas gracias.

Recuerdan que “sólo de puede ver la vida mirando hacia el futuro...”. Jordi ha pasado el relevo a Francesc Vilarasau que fue elegido per aclamación, como nuevo presidente. Ninguno de nosotros pone en duda su capacidad para conducir con buena mano el futuro del Orfeó, naturalmente cuenta con el apoyo de todos.

Pero era, la sustitución de la dirección musical, la pieza clave a acertar, para caminar hacia ese futuro con seguridad. Y en esto podemos asegurar que hemos tenido toda la suerte del mundo al encontrar a Sílvia. Nos dijeron que era la persona ideal per la tarea, y a fe, que no andaban equivocados; hoy, todos estamos de acuerdo.

Sílvia disfruta de la música y del canto, diríamos que está enamorada de ellos, es una persona técnicamente muy preparada; capaz y entestada en conseguir aquello que se propone, pero a la vez nos embelesa y motiva con su manera de hacerlo. Tiene claro qué quiere y cómo lo quiere, y tarde o temprano se sale con la suya, porque además tiene una paciencia inagotable. Nos ha dado una sacudida tan grande, que sólo hemos podido digerirla después de que nos haya contagiado su juventud y vitalidad. Siempre mira las cosas de cara y cada día nos sorprende con nuevos recursos y su saber hacer. Qué duda cabe que se necesita esfuerzo para conseguir las metas a las que quiere llegar, pero estas cosas con ella, son sólo cuestión de tiempo.

Y con todo esto, si Dios quiere, el futuro del Orfeó Balaguerí está totalmente aclarado.

Esteve Biel

Cantaire de l'Orfeó Balaguerí