Número 6, marzo 2018
Editorial
En este número de la Revista Ciencia y Educación, que sale en el mes de marzo, a pocos días del clamor generalizado para que al trabajo de las mujeres se le reconozca la relevancia social que tiene, se ponga fin a la brecha salarial y cese la violencia contra las mujeres, satisface incluir dos artículos en los que se promueve el interés de las adolescentes por los estudios científicos y se pretende sensibilizar a la sociedad y visibilizar la importancia de la mujer en ciencia, divulgando algunas de las contribuciones de las mujeres en este campo. También, se sigue apostando por mostrar la importancia y la viabilidad de la educación inclusiva. Además, se da cuenta de cómo algunas instituciones científicas pueden promover el aumento de la cultura científica de los alumnos y de los ciudadanos en general. Asimismo, se resalta el papel de la Historia de la Ciencia y la posibilidad que ofrece para presentar una ciencia contextualizada. En resumen, el común denominador de los cinco artículos es la insistencia en la necesidad de fomentar y mejorar la cultura científica para todos, hombres y mujeres, sin exclusiones. Esperamos que las ideas expresadas en ellos sean una ayuda para los lectores en su práctica docente.
En el primer artículo, Arribas, Catalán, Rodríguez, García, Fernández y Álvarez dan cuenta de un taller desarrollado en diciembre de 2017, organizado por la ONG GreenlightforGirls (G4G). El objetivo de la jornada fue promover el interés de las adolescentes hacia las disciplinas STEM (acrónimo de las palabras en inglés correspondientes a ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas). Para ello los autores del artículo diseñaron algunas experiencias para que niñas de entre 11 y 15 años pudieran realizarlas y explicar a la luz de los conocimientos científicos algunos fenómenos naturales. En el artículo, indican que, como complemento a ese taller, han creado un juego de tableros sobre “Mujeres y Ciencia”, disponible en abierto en internet.
A continuación, Rivero, estudiante de Bioquímica de la Universidad Autónoma de Madrid, nos presenta el blog creado con otras tres compañeras, con los objetivos de sensibilizar sobre la importancia de la mujer en ciencia y conseguir que los lectores participen activamente en el proyecto. Así nació SheScientist, blog dedicado a científicas cuyo trabajo no ha sido reconocido. Cada semana se fijan en una mujer distinta, e incluyen aquellas que, además de haber realizado descubrimientos científicos relevantes, han contribuido de alguna forma a la mejora de la sociedad.
En el tercer artículo, Julián, Herrero y Monroy dan cuenta de los talleres de química realizados en un colegio de Madrid con alumnos del centro y alumnos con discapacidad intelectual. Defienden el uso de un taller de química como herramienta de inclusión para intentar responder a la situación actual de exclusión que sufre el alumnado con discapacidad intelectual, en el ámbito de la educación, y más específicamente, en la ciencia. Proponen como metodología de aprendizaje la ApS (Aprendizaje-Servicio), basada en que el alumno, a la vez que aprende, hace uso de lo aprendido para dar un servicio a la comunidad.
El artículo de Serena proporciona información sobre cómo el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha desarrollado, a lo largo de las dos últimas décadas, una creciente actividad dedicada a la divulgación, la educación en contextos formales y no formales y la formación del profesorado de diferentes niveles educativos, con el fin de ayudar a situar a nuestros alumnos, y a la sociedad en general, en niveles de cultura científica imprescindibles para tomar decisiones y participar democráticamente en nuestra sociedad con conocimiento de causa. Este artículo repasa la manera en la que el CSIC organiza su interacción con la comunidad educativa.
Cierra este número de la revista el artículo de García-Martín que se fija en la figura de Michael Faraday (1791-1867) deteniéndose, no solo, en sus descubrimientos sobre la inducción electromagnética que han transformado el mundo en el que vivimos de una manera absolutamente prodigiosa, sino que expone de manera resumida la vida y los principales descubrimientos y contribuciones de Faraday, con el objetivo de facilitar su introducción en las aulas de 2º de Bachillerato. El autor resalta la importancia de la utilización de la Historia de la Ciencia en las clases para aumentar el interés y la motivación de los alumnos, por un lado, y logar una enseñanza de la Ciencia contextualizada, por otro, de manera que el alumnado comprenda mejor la interrelación entre la ciencia y la sociedad.
Índice
Paula Arribas Fernández
Investigadora pre-doctoral de la facultad de CC Físicas (UCM)
Cristina Catalán Torrecilla
Investigadora post-doctoral de la facultad de CC Físicas (UCM)
Marina Rodríguez Baras
Investigadora pre-doctoral de la facultad de Ciencias (UAM)
Juan Pedro García Villaluenga
Paloma Fernández Sánchez
Inmaculada Álvarez Serrano
Docentes de las facultades de CC Físicas y CC Químicas (UCM)
Inés Rivero García
Estudiante de Bioquímica de la Universidad Autónoma de Madrid
Álvaro Julián Cortés
Miembro del Comité de Evaluación del Proyecto de Innovación Docente I.amAble
Santiago Herrero Domínguez
Profesor titular de la Facultad de Ciencias Químicas de la UCM
Francisco Monroy Muñoz
Profesor titular de la Facultad de Ciencias Químicas de la UCM
Pedro A. Serena Domingo
Delegación Institucional del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en la Comunidad de Madrid
Diego García-Martín
Estudiante de doctorado en el Instituto de Física Teórica de la UAM-CSIC