La dialéctica generacional y el momento actual

Francisco Avdis

noviembre 08 de 2019

la Dialéctica Generacional y el momento actual


Recordemos que las 2 componentes de este punto vista que organizan la realidad histórica son la "Dialéctica Generacional" (DG) y la teoría del "Liderazgo". Siguiendo a Ortega, partimos de la base que una generación es un compromiso dinámico entre una Minoría y una Mayoría. Para hacer este escrito, a las facciones históricas del momento actual las he agrupado en 4; dos generaciones, las nuevas y la vieja, cada una con su Minoría y Mayoría.


En este momento, en Chile, la lucha anticapitalista ha dado un salto cualitativo en superar el anulamiento con que opera la Minoría que está en el poder sobre las Mayorías. Esto es posible sobre todo dado que la Mayoría de las viejas generaciones ha empezado a focalizar su atención correctamente en aquellos que no permiten evolucionar. En efecto, la Mayoría de las viejas generaciones ha sacado su atención sobre los jóvenes y la ha puesto en su Minoría. Y entonces, las Mayorías se han alineado, y elevando su energía, han superado los impedimentos que el sistema ha colocado (propaganda y violencia) y han ganado la presente gran batalla.


Hay que destacar que el signo más importante de la época es que, en general, las Minorías han perdido la capacidad de liderar procesos. Esto sucede, como indica Ortega, porque no se lideran a sí mismas debido a que están desorientadas o capturadas por la avaricia, virus de altura y otros pecados, y esto, las Mayorías lo saben, se han rebelado y no les hacen caso.


El caso es que las minorías asociadas al capital siempre habían logrado desfocalizarse y colocar la atención sobre otros de la crisis. Ya sean los inmigrantes, las mujeres, los comunistas, los jóvenes, Venezuela, etc. Pero los más jóvenes elevaron notablemente la energía. Yéndose con toda potencia, totalmente decididos, empezaron una campaña radical de desobediencia civil de evasión del Metro, y los más viejos, maravillados, entendiendo el mensaje, las han defendido, se han sumado a la rebelión, y en conjunto, las Mayorías han superado toda anulación por parte del sistema.


Entonces, en este momento, la atención de las dos Mayorías está encima de la pequeña minoría política y empresarial. Pero, ¿Por qué el viejo se alinea con el joven? Porque no hay contradicción entre lo que le quiere el viejo y lo que quiere el joven. Porque están en el mismo nivel, equiparados en situación e intereses: desplazados y sin futuro. Entonces, estamos en la fase final del proceso revolucionario. En el proceso de unión intergeneracional (Silo).


Pero volviendo a nuestro tema. Vamos al pasado reciente que aún recordamos.


Recordemos que durante la década del 90 la minoría que está en el poder logra anular al resto. Para ello utiliza como método principal la falsa expectativa en el consumo como fuente adormecedora. Pero siempre debemos recordar al otro método anulador generacional que es la violencia física en sus distintos grados, desde las guerras hasta la criminalización juvenil. Y la dialéctica violenta se aplicó sistemáticamente durante los 60`s y hasta finales de los 80`s en toda Latinoamérica. Y, entonces, sucedió en el 90, que una generación sacudida por tres largos decenios de barbarie del sistema en contra del joven está asustada y sucumbe ante la propaganda anti joven revoltoso. Entonces, reniega de su proyecto generacional, y seducida con las sirenas del consumo se sumerge en lo mero personal. Con esto se sale del mundo y es anulada históricamente. Y entonces, como efecto de este salirse, empieza a cundir la falta de sentido. Que es el problema de NO intentar realizar el proyecto histórico. Proyecto histórico que, según la teoría de las generaciones por haber nacido en determinada fecha, se tiene asignado sí o sí. La falta de sentido sucede porque se vive sin vocación, es decir, sin conexión interna con lo externo, adhiriendo meramente a lo del medio, sin estar íntimamente ligado con el actuar.


En el sistema, en tanto, también al principio de los 90`s se cae la URSS y Fukuyama glorifica el momento, y anuncia su fin de la historia y todos están de acuerdo con el modelo. Sin embargo, aproximadamente a comienzos del 2000 se acaba la expansión del Imperio y empieza su fase de detenimiento (también influye el límite geográfico del planeta). Es que el proceso de concentración de la riqueza no se detiene y éste es quien impulsa toda la desestructuración del sistema social. Y entonces, necesariamente, la siguiente generación, la del 2005, o sea 15 años después de la del 90, tal como indica la matemática generacional orteguiana, empieza de nuevo la batalla. El año 2011 estalla la rebelión nuevamente, el sistema tiembla pero igual logra anular a los estallidos juveniles. El punto es que solamente están los jóvenes, no hay nadie más. Y se necesita más fuerza para superar la barrera. Porque la propaganda y los métodos del sistema son cada vez más efectivos. Y además, los viejos de las anteriores generaciones están anulados, sin fuerza o contentos, y también los anulan, es que aún ellos no entran en crisis en masa. Falta hacer más patente lo irrealizable e inaudito del sistema. En tanto, en este proceso, en el seno de la rebelión juvenil en el año 2018 irrumpe el movimiento feminista, que toma la posta de un proceso de la mujer que venía ocurriendo hace décadas y se junta con la rebelión juvenil, que está en ese momento prácticamente detenida. El movimiento femenino juvenil logra engarzar con las mujeres de las viejas generaciones y reimpulsa la rebelión. Ahora bien, el feminismo es notablemente el primer intento de engarce generacional. Las marchas de mujeres empoderadas alborotan lo conservador. Pero, lo viejo, con su temor, surge de nuevo, y se empiezan a escuchar voces degradadoras, indicando que sólo es un tema económico, que quieren ganar más que los hombres, nada más, etc. En efecto, la reacción en bloque de los viejos no se hace esperar. Ofendidos por la libertad feminista exigen la anulación de ellas y las llaman al orden. Entonces, los hombres de las viejas generaciones se unen en contra de ellas, en masa se lanzan y el sistema se aprovecha de ello, se les une y las anulan. Es que el sistema vive de ello. De violencia hacia otros, siempre desfocalizando la atención de ellos. Este ensañamiento es impulsado desde las altas esferas del imperio. Porque a todo esto la concentración de la riqueza continúa y todas las economías del orbe están sacudidas. Todos sienten las crisis, el punto principal es: ¿quién es el responsable? y ¿cómo hay que salir? Entonces, a principios del 2017, en plena crisis, el sistema, que aun tiene mucho poder, elige a Trump como líder del Imperio para salir de la crisis. Con él se acaba la cara amable de Obama, y empieza la violencia desnuda, directa y promovida desde la cúpula del sistema. Varios países del mundo se suman al llamado de la violencia y son elegidos varios presidentes del mismo estilo de Trump. Para el sistema siempre los responsables de la crisis son otros. No son ellos y confían en que pueden focalizar la furia de las masas en antiguos problemas irresueltos. Y lo hacen, es que aún tienen mucho poder, y focalizan la atención de las mayorías dónde ellos quieren. Y entonces, empieza la violencia y la propaganda anti joven, anti feminista, anti inmigración (que empezó a hacer crisis durante el 2017), anti aborto y anti LGTB. Que son los típicos recursos de la violencia del sistema para ocultar su fracaso (más las guerras). La reacción «anti» es mundial pero las economías no mejoran. Porque la concentración de la riqueza continúa. El sistema se sigue autodestruyendo. Las recetas del neoliberalismo aplicadas no funcionan. Supuestamente han mejorado los indicadores de EEUU. Pero, si es que ha habido este mejoramiento porque aún no se sabe, ha sido en contra del mejoramiento de la economía del resto del mundo. Porque Trump ha elegido hasta maltratar hasta a sus propios aliados.


Hemos estado al menos casi 3 años en manos de la reacción y como fue no más una reacción «anti», y nada de fondo ha cambiado, y más encima aún, todo ha empeorado. Entonces, como un péndulo, empieza la reacción anti neoliberal que ha sido muy profunda. Durante el presente año, 2019, rechazan a Macri en Argentina, en Ecuador pasa lo mismo, Lenin Moreno, su presidente, debe de echar para atrás su Shock económico. Y ahora en Chile lo mismo.


Pero en Chile ha ocurrido algo más profundo.


El sistema relativamente confiado porque sistemáticamente ha anulado a las nuevas generaciones. Lo cual significa que, además de los jóvenes, el Frente Amplio, su expresión política, también está relativamente anulada. Y además, la Mayoría de los viejos a pesar de que han sido abandonados por su Minoría están sólo implotando y focalizando su rabia sobre los jóvenes, las feministas e inmigrantes tal como quiere el sistema. Entonces, sucedió que ante la subida de solamente 30 pesos del Metro (3,5% del valor), que incluso a ellos no les afectaba porque el aumento era para el boleto general. Los jóvenes más jóvenes (de los liceos) en masa se han rebelado con una potencia inusual y han gatillado una rebelión de la evasión a toda costa que se ha transformado en rebelión general, en contra de todo el modelo. En efecto, todos han entendido este proceso y se han aglutinado las generaciones. Porque, durante años lo que ha sucedido es que el sistema lo único que ha hecho es anular la rebelión pero la concentración de riqueza continúa y no ha mejorado la economía. Y además, la violencia y la corrupción han seguido aumentado globalmente. Entonces, los jóvenes han logrado que la Mayoría de las viejas generaciones empiecen realmente a mirar a quien es el responsable de la crisis. No ya feministas, ni los inmigrantes, ni los mismos jóvenes, etc. En plena crisis, el gobierno reacciona y acostumbrado a reprimir y a no comprender, despliega todas sus formas de anulación: propaganda y violencia. Declaran estado de excepción constitucional, y además, descolocados, cometen muchos errores comunicacionales los que son fácil e inteligentemente aprovechados. Y la rebelión no para. Aún con la amenaza de los militares y los muertos que empiezan a aparecer. Entonces, la rebelión se despliega a todo Chile. Y entonces, multitudinarias convocatorias todas espontáneas y masivos caceroleos ocurren en todo Chile. Y además, este proceso es fundamentalmente no violento a pesar de saqueos e incendios, que de verdad no se sabe quien los hace. Pero todos comprenden y nadie amplifica lo del gobierno. La gente no obedece. Y toda reacción, toda propaganda del sistema es anulada por las redes sociales. Entonces, el viernes 25 de octubre desde las 13.00 horas hasta la tarde, en un hecho histórico, se juntan más de 1.2 millones en la plaza Italia, que es el punto central de Santiago.


Desde la Teoría del Liderazgo, lo principal de este proceso es la patentización de pérdida de dirección social de parte de las Minorías, o lo que es lo mismo, es que las minorías ya no dirigen a la opinión pública. Ésta ya está formada e internalizada por las Mayorías. El sistema deberá funcionar para todos. Las minorías van a perder privilegios y serán supervigiladas por la organización de las mayorías. Y con esto empieza a cerrarse el gran ciclo de las masas dirigidas por minorías que empezó a finales del paleolítico superior y principios del neolítico (la justificación de esta aseveración ya fue tratada en publicación anterior). Y, también, además, se acaba el liderazgo del hombre sobre la mujer que en este momento se había convertido en machismo. Y, en general, se inicia el proceso de la subida de nivel de conciencia del ser humano. Que era la predicción de Silo hecha hace 50 años y que es lo que todos queremos.


Desde la Teoría Generacional, lo principal es que la dialéctica empieza a acabar. Con esto debería empezar a haber un diálogo intergeneracional convergente. Y la historia de los seres humanos empieza a tomar otro rumbo que ya se siente venir. Que tiene que ver con las estrellas…


Contacto: dgeneracional@gmail.com