INTRODUCCIÓN

CAMBIO CLIMÁTICO Y CALENTAMIENTO GLOBAL

El cambio climático es una alteración notable y de larga duración en los patrones del clima del planeta. Estos han aumentado en los últimos años debido al excesivo incremento de CO2 en la atmósfera, producido por la quema de combustibles fósiles a través de la actividad humana o debido a otros factores naturales.

El calentamiento global es el aumento continuado de las temperaturas a nivel mundial causadas por la acción humana. Surgió tras décadas y décadas de emisiones de gases de efecto invernadero (CO2, metano, óxido nitroso, etc...).

¿CÓMO SE HAN PRODUCIDO?

El cambio climático y el calentamiento global surgieron hace muchos años debido a la contaminación provocada por el ser humano, pero existen numerosos mitos que afirman que el clima siempre ha cambiado y que es imposible que el calentamiento global o cambio climático sea solo responsabilidad del ser humano. En nuestra opinión, algunos factores naturales, como el sol o los volcanes, influyen negativamente en el cambio climático. Sin embargo, el ser humano es el mayor responsable, ya que ha destrozado ecosistemas y ha contaminado gravemente a través de la industrialización.

CONSECUENCIAS

  • Una de sus principales consecuencias es el aumento de gases del efecto invernadero, pero ¿Qué es el efecto invernadero?

El efecto invernadero es el fenómeno natural que permite a nuestro planeta mantener las condiciones necesarias para albergar vida. Estos gases cumplen su cometido, pero al aumentar su concentración, la atmósfera retiene más calor del necesario, provocando el incremento de las temperaturas, el deshielo de los polos, la desertificación, incendios, tormentas e inundaciones. Además, el efecto invernadero está aumentando debido a tres principales razones: la quema de combustibles fósiles, la deforestación de bosques y la destrucción de ecosistemas marinos.

Cuantos más gases de efecto invernadero haya, mayor retención de calor habrá. El incremento de los gases aumentan el efecto invernadero natural y provocan el calentamiento global, que da lugar al cambio climático.

  • La contaminación del ser humano puede provocar otras diversas consecuencias a largo plazo, como por ejemplo, las temperaturas serán más cálidas y habrá tormentas intensas, olas de calor más fuertes, derretimiento de glaciares, un aumento del nivel del mar y huracanes más peligrosos. Además, surgirán cambios en los ecosistemas, propagaciones de enfermedades y desapariciones de especies de animales.

NEGACIONISMO

Hay dos tipos de individuos a la hora de analizar los hechos sobre el cambio climático: las personas que creen en él y los que niegan su existencia o también llamados negacionistas.

El negacionismo es una actitud que consiste en la negación de determinadas realidades y hechos naturales relevantes para evadir una verdad incómoda.

La negación del cambio climático es una corriente ideológica opuesta a la explicación del calentamiento global. Quienes siguen esta corriente negacionista atribuyen los cambios climáticos a causas espontáneas, como cambios cíclicos del sol, de la Tierra... Para ellos antes de iniciarse la era industrial y antes de la aparición del ser humano ya existían estos cambios climáticos.

La negación del cambio climático se atribuye a intereses económicos.

HUELLA DE CARBONO

La huella de carbono es la cantidad de emisiones, de gases de efecto invernadero (GEI), que produce el ser humano al fabricar un producto o realizar sus actividades diarias por efecto directo o indirecto. Es la huella que deja nuestro paso en el planeta. Cualquier actividad que realizamos lleva asociada una emisión de Gases de Efecto Invernadero. Se expresa en toneladas de CO2 emitidas.

Este impacto ambiental se controla a través de mediciones en las emisiones durante todo el ciclo de vida. Hay normativas internacionales como ISO 14064, ISO 14067, PAS 2050 o GHG Protocolo, que recogen este tipo de puntos. Según el tamaño de la huella de carbono es posible preparar una estrategia de gestión de emisiones.

La formula para calcular la huella de carbono se obtiene multiplicando el dato de consumo (actividad) por su correspondiente factor de emisión en función del tipo de combustible o gas empleado.

Es importante tener en cuenta que lo que se mide con la huella de carbono (HC) es el impacto de las diferentes actividades que realizamos sobre las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). Al referirnos al transporte o a las combustiones, nos centramos en las emisiones del CO2 por la importancia del cambio climático.

Al calcular la nuestra propia huella de carbono o la de cualquier organización, recibimos información para poder tomar decisiones y conseguir una sociedad más descarbonizada.