Aquí tenemos nuestro primer relato. Se trata de un cuento destinado a los más pequeños de parte de una alumna de 1º de la ESO sobre el ciclo del agua. Esperemos que os guste y que sepáis identificar todos los procesos de un ciclo esencial para la vida en nuestro planeta.
LA VIDA DE UNA GOTA DE AGUA
¡Hola! Me presento, soy Goti. Por mi nombre se puede adivinar que soy una gota de agua, no está muy currado la verdad. Quiero contarte gran parte de mi vida. La historia de las gotas no cambia mucho, pero es interesante. ¡Ahí vamos!
Un día estaba con mis amigas bailando al ritmo de las olas, comenzamos a notar un pequeño cambio de temperatura, ¡hacía mucho calor! De la calor que hacía empezamos a notar que nos íbamos deshaciendo poco a poco. ¡Estábamos volando! No sabíamos lo que pasaba, ¿nos estábamos evaporando? Exactamente, mi abuela me contaba muchos cuentos, y en uno de ellos podía recordar qué decía que cuando las gotas se hacían mayores empezaban un ciclo, “El ciclo del agua”.
Estábamos en la “evaporación”, nos íbamos alzando poco a poco, ya no era una gota de agua. Estaba muy asustada, no sabía que hacer, ¡era agua en forma de vapor! Estaba confusa, pensé en seguir a mis amigas, ellas sí sabían que hacer.
De repente me encontré a una gota, bueno, miento, era una gota en forma de vapor, me contó que hace poco fue absorbida por una planta, ¡que miedo! , y que salió por las hojas en forma de vapor. Yo habría estado horrorizada si una planta me absorbiese. No podría haber soportado el proceso de “transpiración”.
Seguíamos subiendo hacía arriba, cuando menos nos lo esperábamos una ráfaga de aire nos empujó mucho más rápido hacía lo alto, no sabíamos donde íbamos a parar. Pasamos de tener calor a tener frío, nos empezamos a juntar muchas partículas de vapor de agua, todas teníamos miedo, en ese momento pensamos que si estábamos juntas seríamos más fuertes, en ese instante notamos que estábamos comenzando a formar nubes. Esa parte del proceso se llama “condensador”, perdón perdón, se llama “condensación”, las gotas de agua no tenemos buena memoria.
Poco a poco algunas partículas volvieron a su forma de inicio, eran gotas de agua que caían rápidamente a la Tierra de nuevo. Yo era una de ellas, me volví de nuevo una gota de agua, éramos lluvia. A veces cuando estaba en el mar caían muchas gotas de agua encima de mí, así conocí a mis amigas, ellas ya habían pasado por este proceso, que miedo. Esta parte es la “precipitación”.
Va, esta historia da un poco de miedo, te cuento un chiste para que te relajes, ¿qué le dice una gota de agua a otra? -¡Glup! Seguro que te has reído, si no te importa, continúo la historia.
Después de que cayese , caí en la punta de una montaña, muchísimas gotas de agua me empujaban, una corriente de agua me cogió y me estuvo empujando hasta aún no sabía donde. Por el camino muchas gotas de agua se fueron por algunos huecos que habían por la tierra, pensé que no las volvería a ver, todas me habían caído bien. Estaba muy preocupada por ellas pero ahora me importaba más lo que iba a pasar conmigo. Lo que les pasó a ellas era la “infiltración”, un proceso muy raro. Y lo que estaba haciendo yo, ¿qué era?
Recorrí un río hasta que llegue de nuevo al mar, a mi casa, vinieron todas mis amigas a preguntarme qué había pasado, después de un rato vi que las gotas que habían pasado por la “filtración” habían vuelto al mar, pero por otro sitio bajo tierra.
Mi abuela me contó que la última fase por la que había estado se llamaba “escorrentía superficial”. Este ciclo se volvió a repetir muchísimas veces, algunas veces me convertía en nieve, granizo etc. Pero siempre volvía a ser yo.
Laia Boix 1 ESO B