ambient@
MATAR lo libre. Reflexiones sobre la Caza
La domesticación de animales y humanos implantada por los pastores neolíticos anuló al cazador–recolector. Matar a los hombres, esclavizar a la mujer y usar a los niños como mano de obra, interrumpió la transmisión de la cultura oral paleolítica. Un desastre, como el que generan hoy los programas obsoletos, de pérdida de memoria. Es la amnesia que nos impide reaccionar al cambio climático, denuncia el escritor Benigno Varillas en su último libro.
La cultura paleolítica almacenaba la información en la memoria de los seres humanos. La transmisión oral grababa copias de seguridad de la misma. Se hacían en charlas alrededor del fuego. La cultura oral se basó en una capacidad, inimaginable hoy, de acumular información en el cerebro. También en que solo tenían que trabajar menos de dos días a la semana para acopiar alimento, disponiendo de tiempo para aprender, observar fenómenos físicos y naturales, indagar, viajar, charlar, cantar, danzar y cultivarse.
Al implantarse la sociedad neolítica agroganadera, la información se perdió. El Neolítico interrumpió la transmisión oral. Se generó la amnesia colectiva que olvidó hasta que había existido el Paleolítico. Hasta hace poco más de un siglo se ignoraba hasta la existencia del ser humano anterior al descrito en la Biblia. Aún desconocemos el pensamiento de la especie humana primigenia que durante sus primeros 300.000 años fue paleolítica. Solo desde hace 7000 años vivimos inmersos en la domesticación.
La era digital oscura actual, la del software obsoleto, afecta a información generada en apenas las tres últimas décadas. La de hace siete milenios anuló la memoria acumulada en decenas de miles de años de evolución.
Guardaba conocimientos claves para la vida y el desarrollo intelectual del ser humano. Una consecuencia de ese agujero negro provocado en nuestras mentes por los sátrapas, fue olvidar el significado de la caza. Al dejar de estar integrados en la urdimbre de la vida, de respetar y admirar a los seres vivos, asimilando física e intelectualmente su energía con veneración, pasamos a la perversión de matar por placer, como denunció en 1969 Félix Rodríguez de la Fuente y recoge ahora el libro “Matar lo libre, reflexiones sobre la caza” de Benigno Varillas.
Alertan del error de prohibir la caza sin diferenciar y salvar de la quema a su esencia original, que nada tiene que ver con sus formas degradadas. Entre las reflexiones de este libro sobre el devenir de la especie humana, destaca el que conservacionistas de la naturaleza como Rodríguez de la Fuente y Benigno Varillas se posicionen a favor de la actividad cinegética, pero, ¿de qué tipo de caza y de qué cazadores nos hablan?
Más información en el libro:
Benigno Varillas. 2019. “MATAR lo Libre. Reflexiones sobre la caza” La historia cinegética a través del Coto de Doñana. Comentarios a los prólogos a la caza de Ortega y Gasset (1942) y de Félix Rodríguez de la Fuente (1969). Madrid, 2019. 164 pp. 11,5x18,5 cm. 9,80 €. Edita: www.elcarabo.com