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EL ATÚN ROJO, EVALUACIÓN DEL STOCK ORIENTAL Y RECOMENDACIONES DE GESTIÓN

Javier GaratSecretario GeneralCEPESCA 

La actividad pesquera es una de las actividades económicas más importantes del mundo, fuente de riqueza, de empleo y de salud, tanto en los países desarrollados como en los países en desarrollo. Desempeña un importante papel en la eliminación del hambre, el fomento de la salud y la reducción de la pobreza. El pescado es muy nutritivo, una fuente vital de proteínas y nutrientes esenciales.

Según los datos del informe de 2014 de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, FAO, sobre “El estado mundial de la pesca y la acuicultura”, la producción pesquera mundial de pesca de captura registrada en 2011 fue la segunda más alta de la historia con 93,7 millones de toneladas (MTm), solo superada por las 93,8 MTm de 1996. En 2012, la producción pesquera mundial fue de 91,3 MTm, de las cuales 79,7 MTm se capturaron en aguas marinas y 11,6 MTm en aguas continentales. En los últimos años la tendencia general ha sido la estabilidad en las capturas mundiales.

18 países (11 en Asia) capturaron en promedio más de un millón de toneladas anuales, que representaron a más del 76% de las capturas mundiales, siendo China el principal país productor con 13,87 MTm en 2012, seguido por Indonesia con 5,42 MTm, Estados Unidos de América, con 5,10 MTm, Perú, con 4,80 MTm, Federación de Rusia, con 4,06 MTm, Japón, con 3,61 MTm, India, con 3,40 MTm y varios países con menos de 2 MTm como Chile, Vietnam, Myanmar, Noruega, Filipinas, República de Corea, Tailandia, Malasia, Méjico, Islandia y Marruecos. España ocupa el puesto 22 del mundo con unas 952 000 Tm., representando el 1,2 % de las capturas totales mundiales. Los principales caladeros se encuentran en el Pacífico Noroccidental (21,46 MTm), en el Pacífico centro-occidental (12 MTm) y en el Pacífico sudoriental (8,29 MTm), seguidos por el Atlántico nororiental (8,10 MTm) y el Índico oriental (7,39 MTm).

Con relación a los buques de pesca, se estima que en 2012 había 4,72 millones en todo el mundo, siendo la flota asiática la más numerosa con el 68% de la flota mundial, seguida de África con un 16%. En esa fecha, aproximadamente el 79% de los buques de pesca motorizados del mundo medían menos de 12 metros de eslora. La flota de la Unión Europea está compuesta por 83 000 buques de pesca, de los cuales, el 13% procede de España. En nuestro país existían, a 31 de diciembre de 2014, 9635 buques, de los cuales 9303 buques faenaban en el caladero nacional, capturando 394 000 Tm (41,38 %), siendo 7473 de artes menores y capturando 150 000 Tm (15,75% del total), 120 en aguas de la UE no españolas, capturando 32000 Tm (3,36 %) y 210 en aguas de terceros países y alta mar, pescando 526 000 Tm (55,26%) y 2 sin modalidad asignada.

Unos 58,3 millones de personas trabajaron en el sector primario de la pesca de captura y la acuicultura en 2012. De estos, 37 % lo hizo a tiempo completo. El 84% estaba en Asia y más del 10% en África. El empleo en el sector ha crecido más rápido que la población mundial. La FAO calcula que, en general, la pesca y la acuicultura garantizan los medios de subsistencia de entre el 10 % y el 12 % de la población mundial. En la Unión Europea la pesca genera empleo a 130 000 tripulantes, de los cuales el 28%, es decir, unos 36 400, se generan en España.

El consumo aparente mundial de pescado per cápita fue de en torno a 19,2 kg en 2012, habiendo crecido desde los 9,9 kg de promedio en el decenio de 1960. En la Unión Europea el consumo medio per cápita es de 22 kg y en España es de 37 kg, siendo el quinto país más consumidor de pescado del mundo. Una porción de 150 g de pescado puede proporcionar entre un 50% y un 60% de las necesidades proteínicas diarias para un adulto.

En 2010, el pescado representó el 16,7% del aporte de proteínas animales de la población mundial y el 6,5% de todas las proteínas consumidas. La proporción de la producción pesquera utilizada para consumo humano directo fue del 86% (136 millones de toneladas) en el año 2012 y, el resto (21,7 millones de toneladas), se destinó a usos no alimentarios, como la harina o aceite de pescado.

De las poblaciones de peces marinos evaluadas en 2011, la FAO considera que el 61,3% están plenamente explotadas y el 9,9%, subexplotadas. Es decir, que el 71,2% se encuentran en buen estado. Para la FAO, plenamente explotadas son las poblaciones capturadas dentro de niveles sostenibles desde el punto de vista biológico. Estas poblaciones cuentan con un nivel de abundancia igual o mayor que el nivel relacionado con el rendimiento máximo sostenible. Las poblaciones explotadas al nivel de rendimiento máximo sostenible producen capturas iguales o muy próximas a su producción máxima sostenible, por lo que no tienen margen para aumentar la capturas y requieren una ordenación eficaz para mantener su rendimiento máximo sostenible. En cambio, las poblaciones con una biomasa muy por encima del nivel del rendimiento máximo sostenible, es decir, las subexplotadas, pueden tener alguna posibilidad de aumentar su producción. Por otro lado, el 28,8% restante de poblaciones de peces marinos se encuentran sobreexplotadas, es decir, han sido capturadas en un nivel insostenible desde el punto de vista biológico. Éstas presentan una abundancia inferior al nivel que puede producir el rendimiento máximo sostenible, por lo que necesitan planes de ordenación rigurosos que las restablezcan a fin de lograr una productividad plena y sostenible. Se estima que el restablecimiento de las poblaciones sobreexplotadas podría aumentar la producción en 16,5 millones de toneladas y la renta anual en 32 000 millones de USD.  

EL PAPEL DE CEPESCA EN EL DESARROLLO DE UNA PESCA RESPONSABLE Y SOSTENIBLE 

La Confederación Española de Pesca centra su actividad en la defensa de los intereses de las 38 asociaciones de armadores distribuidas por todo el litoral español que forman parte de la misma.

Los primeros interesados en asegurar biomasas de poblaciones de peces saludables y capaces de satisfacer la demanda de pescado por parte de los consumidores, son los propios pescadores. Por ello, resulta paradójico que algunos grupos conservacionistas carguen sus tintas contra la actividad de un colectivo que se esfuerza constantemente en asegurar una pesca sostenible.

Actualmente, las nuevas generaciones de profesionales del mar son conscientes del equilibrio que su actividad necesita, no solo por las consecuencias que tendría su ruptura, sino también como fruto de una auténtica sensibilidad y concienciación personal y colectiva sobre la importancia del respeto y la protección del medio ambiente y, por otra parte, como consecuencia del sentido común.

Por ello, y a instancias de nuestros propios asociados, CEPESCA, en su día a día, defiende el peso y la importancia de la pesca española en el mundo en todos aquellos foros en los que está presente, tanto nacionales como en el contexto de la UE y los organismos mundiales.

La flota española es actualmente una de las más sostenibles del mundo y ello es consecuencia, como decía, de la iniciativa de los propios protagonistas, pero también de un cumplimiento escrupuloso de la legislación que regula su actividad. CEPESCA defiende que las normas de gestión se basen en los mejores dictámenes científicos, en el adecuado control de las pesquerías y en el aprovechamiento máximo que nos ofrece la naturaleza dentro del rendimiento máximo sostenible (RMS), apostando por la integración de los aspectos sociales, económicos y medioambientales que definen el concepto de la sostenibilidad en la aplicación de las políticas pesqueras.

En este sentido, vemos como, a menudo, las propuestas iniciales de la Comisión Europea suelen ser demasiado restrictivas. Por ello, defendemos que se debería de tener como objetivo el RMS, pero teniendo en cuenta las consecuencias socioeconómicas para los pescadores e intentando que las propuestas tengan el menor impacto negativo en los mismos, por lo que creemos que se deberían adaptar inteligentemente las nuevas propuestas a los posibles escenarios entre 2015 y 2020, a través de planes plurianuales de gestión. Creemos firmemente que se deben de reconocer los esfuerzos del sector pesquero español y las inversiones realizadas en investigación y control para la gestión y recuperación de las diferentes especies.

La flota española y CEPESCA centran también sus esfuerzos en denunciar y exigir, ante todos los organismos a los que acuden, el mismo cumplimiento de las normas pesqueras por parte de otras flotas que, además de carecer de esta sensibilidad por parte de sus integrantes individualmente, son muy laxas en cuanto a la aplicación de la normativa. He aquí la principal amenaza a la sostenibilidad, la pesca ilegal o aquélla sin escrúpulos y que desprecia las leyes.

Entre los objetivos de CEPESCA se encuentra el de aunar esfuerzos para hacer una mejor defensa de los intereses económicos y profesionales del sector pesquero español. Igualmente, y como corresponde a cualquier sector económico, otro de los objetivos es mejorar la competitividad de las empresas y, dentro de este apartado, tiene una especial relevancia el fomento de la vocación hacia esta actividad y trabajar para mejorar la imagen de la pesca que, como ya he apuntado, muchas veces es injustamente manchada. Igualmente, trabajamos para ser un interlocutor privilegiado de las distintas administraciones, fomentando el diálogo y la colaboración con las mismas. Y por último, promovemos el desarrollo de una pesca sostenible y responsable, favoreciendo el contacto y el trabajo en equipo con los estamentos científicos, paralelamente a la lucha constante contra la pesca ilegal.

Por otro lado, es importante resaltar la importancia que tiene para nuestro país la dimensión externa de la política pesquera comunitaria (PPC). Y dentro de ella, merecen una especial atención los acuerdos de asociación pesquera con terceros países, el papel de la UE en las Organizaciones Regionales de Pesca, la necesaria coherencia entre las políticas de pesca, desarrollo, cooperación, medioambiente y comercio, entre otras, y las inversiones pesqueras comunitarias en terceros países.

Para CEPESCA, todas las artes de pesca son importantes y complementarias para España, desde las artes menores y demás artes de bajura, a las que utiliza la flota de altura y gran altura, y todos ellas, sin excepción, están dirigidas a la sostenibilidad. Las artes de pesca no son ni buenas ni malas, simplemente, son o no son sostenibles en función de la utilización que se hagan de ellas. Y ello depende directamente de cómo se regulan, dónde y cuándo se usan, y todo ello, fundado en criterios científicos probados.

INICIATIVAS DE CEPESCA BUSCANDO LA SOSTENIBILIDAD 

Merece la pena hacer un repaso de los diferentes proyectos impulsados por CEPESCA y dirigidos a la sostenibilidad, o bien aquellos en los que hemos participado activamente.

Enfocándonos primero en los más actuales, CEPESCA, conjuntamente con el MAGRAMA, BirdLife Internacional, Seo BirdLife y la Cooperativa de Armadores del Puerto de Vigo (Arvi), organizó una Conferencia Internacional en Vigo sobre la “Reducción de capturas accidentales de aves marinas en la pesca”. El objetivo de esta reunión fue analizar y descubrir los mejores sistemas para evitar capturas de aves marinas en la pesca de palangre.

Otro de los proyectos más importantes desarrollados fue el de “Mejora de la selectividad de los artes de arrastre en el Mediterráneo Español”. Este proyecto, nacido a iniciativa de CEPESCA, contó con la asistencia del Instituto Español de Oceanografía (IEO) y estuvo cofinanciado por el Fondo Europeo de Pesca y la Fundación Biodiversidad del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, a través de la Convocatoria de ayudas de Acciones Colectivas.

Este proyecto pretendió evaluar la selectividad y eficacia de redes de arrastre con diferente diámetro de torzal: tres y cinco milímetros. El objetivo fue proponer mejoras en el reglamento comunitario de Medidas Técnicas del Mediterráneo, que permitan avanzar hacia una pesca más selectiva y sostenible a este segmento de flota.

Por otro lado, dentro del marco del Programa “Emplea Verde” de la Fundación Biodiversidad, desarrollamos uno de los proyectos de los que estamos más orgullosos, el proyecto SOSPESCA, para la mejora de la sostenibilidad del sector pesquero español. Este proyecto obtuvo unos resultados excelentes y dentro de él se formó a más de 250 trabajadores del sector pesquero en la aplicación de buenas prácticas para reducir el impacto ambiental de su actividad sobre el medio marino. En el marco de SOSPESCA se desarrollaron nueve acciones formativas gratuitas cofinanciadas por el Fondo Social Europeo, que estuvieron dirigidas a trabajadores de las flotas de arrastre de altura, altura congelador y bajura, palangre de fondo y superficie litoral y altura, cerco litoral, congelador y atún rojo. Se realizaron, además, asesoramientos personalizados a bordo de distintos segmentos de flota. Los resultados de este proyecto se presentaron en la Jornada “El compromiso del sector pesquero español con el desarrollo sostenible”, a la que acudió la Ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina.

Asimismo, como consecuencia de este proyecto y conscientes de la importancia de garantizar el futuro de la pesca, que constituye una riqueza biológica, económica, social, cultural y alimentaria, CEPESCA se adhirió al “Compromiso del sector pesquero español con la pesca sostenible”. Este documento, que recoge los principios esenciales que deben regir la actividad pesquera sostenible, forma parte de la estrategia de la Confederación para poner en valor el estándar de sostenibilidad que cumple la flota española. El documento es una declaración de compromiso para avanzar hacia una pesca más sostenible. Entendemos, además, la sostenibilidad en su sentido más amplio, es decir, no sólo desde un punto de vista ecológico, sino también desde el punto de vista social y económico. A grandes rasgos, esta declaración de principios está basada en una serie de puntos fundamentales. El primero de ellos es la promoción de la aplicación efectiva del Código de Conducta para la Pesca Responsable de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). Otro de ellos es el de acatamiento a la legalidad vigente, tanto autonómica, nacional, comunitaria e internacional, así como pescar de manera responsable para asegurar la conservación y una gestión efectiva de los recursos acuáticos vivos. Dentro de este mismo apartado, también se exige el compromiso de luchar contra la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada, y el de colaborar con todos los estamentos científicos, con el fin de asentar la gestión pesquera en su conjunto sobre una base científica sólida. Otro de los puntos fundamentales del documento es el fomento de la concienciación de pescadores y armadores sobre la responsabilidad en la pesca mediante la información, la formación y la capacitación sobre esta materia. También es vital ofrecer condiciones de trabajo y vida, seguras, sanas y justas, cumpliendo las normas de las organizaciones internacionales competentes. Cumplir con los planes de gestión y recuperación de especies, así como apostar por la innovación en artes de pesca más selectivos, la minimización de los descartes y la captura incidental de especies protegidas. Por último, otros dos puntos fundamentales del documento apuntan hacia una apuesta por la eficiencia energética y el diseño de estrategias adecuadas para alentar la correcta gestión de residuos, así como fomentar el mantenimiento de la calidad, la diversidad y la disponibilidad de los recursos pesqueros en cantidad suficiente para generaciones presentas y futuras. Todo ello, teniendo como referencia la seguridad alimentaria, el alivio de la pobreza y el desarrollo sostenible. Este documento, con cada uno de sus compromisos, está abierto en la página web de CEPESCA y a él se pueden adherir todos los armadores que estén interesados en la mejora de la sostenibilidad.

Hasta aquí lo más reciente, pero la labor de la patronal en favor de la sostenibilidad tiene ya años de recorrido. Así, desde CEPESCA hace tiempo que emprendimos el camino hacia la reducción de consumos con un proyecto sobre “Auditorías Energéticas de los Palangreros de Superficie”. Este tipo de auditorías energéticas son una labor que ha tenido un auge imparable desde que se comenzaron a desarrollar. Con ellas, es posible, no sólo identificar cómo se genera y utiliza la energía en los buques, sino también poder diseñar propuestas de mejora que disminuyan dichos consumos. Estas propuestas, además de ser factibles desde el punto de vista técnico, deben serlo también desde el punto de vista de la rentabilidad económica. Ello asegura que, aunque exijan una inversión inicial, ésta se recupere en un periodo de tiempo corto, a partir del cual proporcione ahorros.

Dentro del mismo entorno del consumo energético, también hay que destacar el “Proyecto NOx”. Con él se dio respuesta a una doble necesidad del sector pesquero español. Por un lado, la preocupación por la rentabilidad, amenazada por los altos precios del gasoil marino y, por otro, responder a la creciente sensibilidad medioambiental a todos los niveles, que se traduce en medidas para limitar la contaminación atmosférica con cambios en la normativa nacional e internacional, también costosos para el sector. Asimismo, echando la vista atrás, en el año 2011 firmamos un acuerdo de colaboración con el IEO con el objetivo del “aprovechamiento sostenible de los recursos vivos marinos en todos los mares donde faena la flota de CEPESCA”.

Otros ejemplos de nuestras colaboraciones con las administraciones públicas y los estamentos científicos son, por un lado, el Proyecto “Estudio sobre el rendimiento y captura por especie en la pesquería española de Palangre de Fondo en la División Vía del CIEM”, y también cabe destacarse el Proyecto Eclípasame, un ambicioso trabajo que pretendió analizar los efectos sinérgicos del clima y de la pesca en los ecosistemas marinos demersales. También tienen especial trascendencia dos proyectos cuyo objetivo es reducir los descartes de las pesquerías. El primero de ellos es el Proyecto Redes, que pretende reducir los descartes de las flotas para reducir tiempo, costes económicos y productivos. El segundo de ellos es el Proyecto Oasis, para reducir la mortandad de las tortugas marinas.

Por último, hay que mencionar, que en el año 2009, CEPESCA, junto a ANFACO-CECOPESCA, se puso al frente de un proyecto muy ambicioso del sector pesquero, el Proyecto Recopes. Éste tenía como objetivo dar respuesta a la gran demanda de información y conocimiento sobre el sector pesquero, pero con respuestas claras y precisas y, sobre todo, al conjunto de la sociedad. La plataforma, de acceso libre y gratuito, disponía de una base de datos donde se recopilaban textos legislativos, divulgativos, científicos, didácticos, foros de discusión, anuncios de eventos, etc. Actualmente, este proyecto está en fase de recuperación como una manera de reforzar el objetivo de la divulgación y difusión del conocimiento.

Por otro lado, junto con nuestras organizaciones atuneras, hemos trabajado en el desarrollo de dispositivos de concentración de peces no enmallantes, para evitar así la captura accesoria de tortugas marinas y tiburones. Hoy en día, y desde el 1 de enero de 2015, el 100% de la flota española y asociada utiliza estos FAD no enmallantes. Así mismo, esta flota ha desarrollado, junto con empresas especializadas, el observador electrónico a bordo, mediante la incorporación de cámaras, tanto fotográficas como de vídeo, con el fin de grabar el 100 % de las operaciones de pesca de los buques. Igualmente, hemos desarrollado un código de buenas prácticas para que todos los pescadores aprendan a liberar las especies que accidentalmente puedan entrar en las redes.

Además, hemos desarrollado una iniciativa denominada “Tuna Transparency Iniciative” (TTI) en el marco del Consejo Consultivo de Flotas de Larga Distancia (LDAC) con el fin de contribuir a mejorar la gobernanza en países del África Occidental y luchar contra la corrupción y la pesca ilegal. En este sentido, también hemos firmado un “Protocolo de intenciones para la monitorización de la actividad pesquera por parte de la Secretaría General de Pesca de buques de interés español abanderados en un tercer país” con el fin de que los buques extranjeros, propiedad de empresas españolas, puedan ser controlados por la administración general del Estado como si fueran españoles.

No cabe duda de que la recopilación de los diferentes trabajos y proyectos realizados por CEPESCA en favor de la sostenibilidad acreditan nuestra posición a favor de ella, y de una manera férrea, en todos los foros, reuniones y organismos en los que estamos presentes. Estamos muy cerca de los armadores y de los pescadores y, desde CEPESCA, podemos asegurar que nuestro sector es un claro ejemplo de sostenibilidad, ya que aplica un modelo de gestión pesquera con los mayores y mejores estándares en su ejecución, un alto conocimiento científico y un exhaustivo control de las pesquerías.

La sostenibilidad está en el ADN de la Confederación desde su nacimiento en 2007 y, aunque se trata de un camino arduo y cargado de obstáculos a veces, lo que nos ha demostrado trabajar en pos de este objetivo durante todos estos años es que el sentido común acaba imponiéndose y, en el mundo de la pesca, el mayor es que todos queremos mantener la riqueza de nuestros mares. Cualquier otra opción es un sinsentido. Por último, CEPESCA, a través de su página web, y usando la gran difusión que permiten las diferentes redes sociales y diferentes portales online, pone a disposición de la propia sociedad, el sector pesquero, las administraciones y los científicos, gran cantidad de tutoriales, videos divulgativos, campañas educativas o documentos científicos. Todo este material va encaminado a dirigir las actividades del sector hacia una pesca cada vez más sostenible y a la difusión de las buenas prácticas del sector.