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SUELTA DE TORTUGAS EN CABRERA

Marineland Mallorca, el parque zoológico con el delfinario más galardonado de España y la Fundación Aspro Natura han participado un año más en la tradicional suelta de tortugas en el Parque Nacional Marítimo Terrestre del Archipiélago de Cabrera. En esta ocasión, dos ejemplares de la conocida como tortuga boba (Caretta caretta) han sido puestas en libertad a través de la campaña de asistencia a los varamientos de tortugas marinas, puesta en marcha en 1998. Esta acción es posible gracias a la colaboración con el Servicio de Protección de Especies de la Conselleria d’Agricultura, Medi Ambient i Territori, entre otras entidades públicas.

La acción medioambiental de suelta de tortugas contó con la presencia del Presidente de las Islas Baleares, José Ramón Bauzá, del Conseller de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio, Biel Company, la directora general de Medio Natural, Educación Ambiental i Cambio Climático y del teniente de Alcalde de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Palma, Andreu Garau. Así mismo, también ha participado Rafael Abraham, Director de Marineland Mallorca y Coordinador de las Islas Baleares de Aspro-Ocio, acompañado de parte del equipo de zoología del parque, encargados directos del cuidado y recuperación de estas tortugas.

Marineland Mallorca, la Fundación Aspro Natura y el Govern; así como el COFIB (Centro de Recuperación de Fauna de las Islas Baleares), el Servicio de Emergencias 112 y el Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil,  trabajan de manera conjunta para recoger y recuperar tortugas que aparecen en las aguas cercanas a las costas baleares. Estos ejemplares rescatados reciben de zoólogos y biólogos de Marineland Mallorca todo tipo de cuidados  antes de que sean devueltos a su hábitat natural y vuelvan a formar parte de la fauna balear. La red de asistencia que atiende los varamientos incluye centros de la Fundación Aspro Natura en Mallorca, el GOB (grup ornitològic Balear) en Menorca, el CREM (centro de recuperación de especies marinas) en Ibiza, y el Aula del Mar Vell Marí en Formentera.

En esta suelta fueron liberadas dos tortugas de la especie tortuga boba (Caretta caretta),  . La primera de ellas, con un peso de 26 kilogramos, fue encontrada el pasado mes de marzo en Sa Ràpita, presentando síntomas de infección. La segunda, de mayor tamaño, y descubierta en mayo en la Colonia de Sant Pere, presentaba las lesiones típicas provocadas por una malla. 

El Presidente de las Islas Baleares, José Ramón Bauzá,  y el Conseller de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio, Biel Company realizando la suelta de una tortuga en Cabrera. 

Actualmente el centro zoológico Marineland Mallorca cuenta con otras cuatro tortugas en recuperación que pueden ser visitadas. Todas serán devueltas a su hábitat natural de manera escalonada, y forman parte del estudio que se lleva a cabo con el fin de conocer el desarrollo de la especie tanto en el Mar Balear, como en el resto del Mediterráneo.

Durante los años 1998-2013 se ha desarrollado una campaña de asistencia a los varamientos de tortugas marinas en colaboración con el Servicio de Protección de Especies de la Conselleria d’Agricultura, Medi Ambient i Territori, que tiene como objetivos principales la recuperación de ejemplares, la elaboración de registros anuales de varamientos y el desarrollo de actividades de educación ambiental, estableciéndose una red de información con un teléfono de guardia las 24 horas. La red de asistencia que atiende los varamientos incluye centros en: la Fundación Aspro Natura en Mallorca, el GOB (grup ornitològic Balear) en Menorca, el CREM (centro de recuperación de especies marinas) en Ibiza, y el Aula del Mar Vell Marí en Formentera.

Durante los últimos 15 años se han registrado un total de 708 varamientos de tortuga boba (Caretta caretta) en las Islas Baleares, siendo la captura accidental con palangre de superficie la principal causa de varamiento de las tortugas marinas en el Mar Balear, si bien en los últimos años se ha observado un descenso de los varamientos por esta causa, aumentando el número de tortugas heridas por hélices de embarcación o enmalladas en plásticos y restos flotantes. Se tomaron datos biométricos de todos los animales varados, se realizaron necropsias de los cadáveres y se recuperaron los animales heridos o enfermos. En el centro de recuperación de Mallorca existe una base de datos con 353 historiales clínicos y se mantienen un importante archivo fotográfico. Se ha colaborado con la Universidad de Barcelona aportando muestras para estudios genéticos y de alimentación, participando en la campaña de marcaje con emisores para el seguimiento vía satélite de animales liberados en el marco del programa LIFE-Posidonia, cofinanciado por la Unión Europea y el Gobierno de las Islas Baleares en el año 2004. Paralelamente, se ha desarrollado un programa de educación ambiental dirigido a los escolares, con material de trabajo específico sobre las tortugas marinas. También se ha trabajado con otros colectivos relacionados con el mar en campañas de divulgación sobre los problemas de conservación de las tortugas marinas. Actualmente se mantiene un contrato menor de servicio para el seguimiento y recuperación de fauna marina catalogada en las Islas Baleares que recibe el soporte del Cofib (Consorci de recuperació de la fauna de les Illes Balears).

El Mar Balear es un área importante de alimentación para la tortuga boba (Caretta caretta) en sus largos viajes migratorios. Nos visitan ejemplares juveniles y subadultos que, procedentes tanto de las poblaciones atlánticas como del Mediterráneo oriental, permanecen en una amplia zona comprendida entre Baleares, Cerdeña y el norte de África hasta alcanzar la talla adulta. Presentes durante todo el año, son más fáciles de detectar durante la primavera y el verano. En el Mediterráneo occidental el principal problema de conservación para la especie es la captura accidental en artes de pesca, especialmente con los palangres de superficie. Las tortugas capturadas en los anzuelos de palangre son devueltas al mar con el anzuelo clavado, lo que puede comprometer seriamente su supervivencia. También se producen numerosas capturas de tortugas por las embarcaciones de artes menores que calan trasmallos y en las redes langosteras. 

Las tortugas marinas están expuestas a otros peligros como las colisiones con embarcaciones, la ingestión de materiales flotantes indigeribles, la dificultad de encontrar alimento debido a la sobreexplotación de los recursos, los enmallamientos en plásticos y restos flotantes, la contaminación y los vertidos de petróleo.

Todo ello genera la presencia en nuestras costas de animales que precisan atención veterinaria.

Hasta la fecha se han atendido un total de 9 varamientos de tortugas marinas.

Las tortugas marinas son especies emblemáticas de la fauna balear, a través de este sencillo acto de liberación de ejemplares recuperados, se pretende alertar a la sociedad balear de la importancia que tiene la protección de las especies y los ecosistemas para garantizar la biodiversidad. Ningún programa de conservación puede vertebrarse sin la colaboración ciudadana.

¿Por qué es importante hacer un seguimiento de los varamientos de tortugas marinas? 

El trabajo del equipo técnico en el seguimiento sistemático de los varamientos tanto de los ejemplares vivos como muertos es importante por varios motivos:

• El estudio de los datos de los varamientos ofrece información valiosa sobre aspectos relacionados con la biología y ecología de las poblaciones de tortugas marinas.

• La continua presencia de tortugas marinas heridas o enfermas en nuestro litoral es un problema que necesita solución. Los resultados obtenidos revelan la eficacia de los centros de recuperación en la rehabilitación de un importante número de ejemplares, labor que cobra importancia dándole continuidad en el tiempo.

• El marcaje de las tortugas liberadas permite el estudio de las poblaciones no sólo a nivel de nuestra comunidad, sino en todo el Mediterráneo. En el centro de Mallorca se han producido recapturas de 3 ejemplares. En el año 2002 se atendió un juvenil que presentaba dos marcas ICONA 5681 y Rac/spa-po box 24 Tunis 1002 Tunisia. Posteriormente se pudo averiguar que el ejemplar procedía del centro de recuperación de fauna la Granja del Saler en Valencia donde había sido intervenida quirúrgicamente. En el año 2010 se recuperaron dos ejemplares, uno proveniente de la Toscana (Italia) donde había sido capturado por una embarcación palangrera y otro proveniente del centro de recuperación de Valencia. Asimismo, un ejemplar liberado en Cabrera en 1993 fue recapturado por un pescador en Delly, Sidi El Medjni Argel (Argelia en el año 1994.

• Las campañas de educación han contribuido a promover en la sociedad balear el cambio de actitudes y la colaboración, favoreciendo la aceptación de las medidas necesarias para la conservación de la especie.