Salida a Béjar

El último fin de semana de enero un grupo de alumnos del Colegio, acompañados por D. Luis Leza, el P. Juan Boronat SJ y algunos padres de alumnos se aventuraron a subir a la Sierra de Béjar (La Covatilla) dentro de las actividades de este curso para el Grupo de Montaña San José.

Desde nuestro Taller de Periodismo, Rodrigo Martínez nos cuenta la experiencia:

“Al llegar al albergue, en el cual nos hospedábamos la noche del viernes, se notaba de primeras el frío. Fue una tarde de descanso, además de aprender a usar el material para la escalada. Al día siguiente, nos levantamos temprano para no perder el sol de la mañana y tener un buen camino. Comenzamos subiendo la ladera, un inicio tranquilo donde pudimos observar la poca nieve que pisábamos, que cada vez se acumulaba más y más hasta estar caminando sobre grandes capas de nieve. Al llegar a la parte alta de la montaña, observamos que el andar se hizo traicionero y si pisábamos de forma errónea, nuestros pies se hundían en el suelo. Fueron esos momentos en los que pudimos tomarnos con humor algunas caídas.

Llegamos a un punto alto de la sierra, en el cual descansamos entre montones de escarcha bastante impresionantes y bonitos.

Poco después continuamos nuestro camino a la parte más alta de la sierra. El camino empezaba a hacerse cansado y duro. No es nada fácil andar sobre capas amontonadas de nieve, sobre todo cuando el sol empieza a derretirlas. Al llegar a lo alto pudimos observar el impresionante paisaje del cual nos sentíamos reyes.

La vuelta tuvo sus baches, pues por culpa de la nieve derretida y nuestro cansancio, nos salimos del camino y entramos en una zona que ninguno de los caminantes olvidaremos. Fue una etapa dura, llena de bastante esfuerzo y algo doloroso, pues nos hundíamos de manera inmediata al pisar el suelo, pero se contrastaba un poco con las anécdotas y caídas de algunos de nosotros. Poco después nos enganchamos de nuevo al camino y acabamos en una fuente por la cual habíamos pasado anteriormente, pero esta vez no estaba cubierta de nieve.

Llegamos sanos y salvos, con una gran sonrisa y una experiencia autentica para llevarnos a casa”.