Las tareas de cuidado en condiciones de adversidad

En materia de trabajo de cuidados en condiciones de adversidad, los gobiernos deben incluir entre su presupuesto acciones que garanticen los derechos de las personas con discapacidad, como está establecido en la Constitución y como parte de las funciones del Estado. Este gasto en servicios y atención facilitará y garantizará que las mujeres que cuidan, cuenten con derechos y oportunidades para realizar trabajo remunerado, estudios u otras actividades que no han podido desarrollar ante la amplitud del tiempo y el desgaste intensivo de energía, señaló la Mtra. Hilda Eugenia Rodríguez Loredo, profesora de asignatura de la Facultad de Economía de la UNAM, durante el Seminario Permanente sobre necesidades y problemas sociales en México: Trabajo de cuidados en contextos de desigualdad social, realizado el 2 de mayo en modalidad virtual a través del canal de YouTube de la Escuela.

Las discusiones de los años recientes sobre el papel de trabajo de cuidados al interior de los hogares, resaltan su importancia para la reproducción social y el funcionamiento de las actividades económicas.

En la octava sesión, Las tareas de cuidado en condiciones de adversidad, la especialista definió al trabajo de cuidados como el "trabajo necesario para satisfacer las necesidades más básicas y cotidianas de todas las personas", mismo que debe considerar las características específicas que tendrían esas labores según los rasgos sociodemográficos y de salud de las personas cuidadas, esto es, la edad, la condición y el tipo de discapacidad, ya que esto dará lugar a determinadas cantidades de tiempo invertido y esfuerzo de las personas que cuidan, además, de las oportunidades para desarrollar las habilidades y capacidades de las personas cuidadas.

Las tareas que se llevan a cabo en este tipo de trabajos incluyen ayudar a las personas en la atención de sus necesidades cotidianas básicas como bañarse, vestir y comer, hasta proporcionar apoyo emocional y físico.

Este trabajo no remunerado que en su mayoría es realizado principalmente por las mujeres genera desigualdades, lo que representa una dificultad para que puedan ejercer sus derechos.

Al hablar del derecho al cuidado de las personas con discapacidad, puntualizó algunas condiciones adversas u obstáculos que existen para realizar sus cuidados como: nivel de ingresos insuficiente, instancias públicas de cuidado nulas o deficientes, familiarismo, acceso a la seguridad social nula o insuficiente, infraestructura nula o deficiente, lo que los deja fuera del ejercicio y garantía de otros derechos. "En este trabajo de cuidados no remunerado se visualiza un gran subsidio de parte de las mujeres al Estado, una gran cantidad de recursos que el Estado se está ahorrando del presupuesto para designarlo a otras actividades" señaló. 

"La gran diferencia en los tiempos dedicados a los cuidados y la energía destinada a ello, es el tipo de discapacidad y la edad de quienes son cuidadas o cuidados, en general, requieren una atención constante, sin embargo, es de notar que una discapacidad motriz requiere de mayor fuerza para apoyar a las personas en su movilidad, por otra parte, las discapacidades intelectual y mental, necesitan acompañamiento permanente para prevenir situaciones de peligro, como accidentes, interacciones no deseadas con otras personas o abuso sexual por parte de personas conocidas o desconocidas" mencionó.

Consideró que para atender las bajas oportunidades que tienen las personas con discapacidad mayores de 20 años de ejercer sus derechos a la educación y al desarrollo de sus capacidades laborales es importante que los tres niveles de gobierno desarrollen un ejercicio diagnóstico de identificación de necesidades para esta población y un replanteamiento de las prioridades dentro del presupuesto, respecto a los problemas que tienen.

Además es "necesario reconocer que las mujeres que cuidan están realizando los cuidados en condiciones de adversidad ya que no cuentan con los servicios de cuidado que las apoyen en la atención de sus hijas e hijos con discapacidad; tampoco cuentan con suficientes ingresos para garantizar su medicación oportuna y suficiente”.