ACADEMIA

Políticas públicas en materia de infancia y juventud migrante

 

El 29 de noviembre se realizó la cuarta sesión del Seminario “Violencias que impiden la integración de la infancia y juventud migrante en la sociedad: xenofobia, racismo y discriminación” coordinado por el Dr. Javier Carreón Guillén, profesor de carrera de la ENTS; y la Dra. Ana Luz Minera Castillo del Instituto de Investigaciones Antropológicas.

La mesa denominada Políticas públicas en materia de infancia y juventud migrante, se realizó en modalidad virtual transmitida a través del canal de YouTube de la Escuela Nacional de Trabajo Social, se contó con la participación de la Mtra. Mónica Valdés González del Seminario de Investigación en Juventud (SIJ) UNAM; el Mtro. Fernando Aguilar Avilés profesor de la ENTS; el C. Adán Jácome León integrante de la asociación Deportados Unidos en la Lucha; y el Lic. Óscar Dávila Carrasco, Jefe del Departamento de Atención a NNA y Personas Migrantes en Situación de Vulnerabilidad del Instituto Nacional de Migración.

La Mtra. Mónica Valdez González inició definiendo que la política migratoria es una herramienta fundamental usada por los gobiernos nacionales para definir las responsabilidades y restricciones que regulan a su población extranjera, y tiene impactos fuera del territorio del país que la crea. “Ejemplo de ello es la criminalización del migrante y la colaboración de policías locales con las autoridades migratorias que han producido más de dos millones de deportaciones durante la última década” subrayó.

México, Guatemala, el Salvador y Honduras concentran el 91 % de las deportaciones. Sólo el 73 % de la población indocumentada en Estados Unidos proviene de México o Centroamérica, por lo que estos cuatro países están siendo desproporcionadamente afectados por el endurecimiento de la política migratoria, y en particular por las medidas de deportación.

Apuntó que en todos los casos es necesario de manera relacional comprender las motivaciones de las diferentes movilidades: desigualdades estructurales, altas tasas de violencia social y de género, pobreza, inseguridad alimentaria e incluso tradición migratoria de la región.

La migración y la movilidad humana nunca ha sido lineal mucha de la migración de México a Estado Unidos está determinada por el trabajo agrícola, la unificación familiar, muchas personas huyen de contextos adversos violentos, retorno, deportación.

“Las motivaciones de la movilidad marcan en un primer momento el curso de las trayectorias migratorias y el tipo de inserción de las y los jóvenes, por ejemplo, la reunificación familiar difiere en términos del curso de la trayectoria frente a una movilidad forzada. El estatus o la condición migratoria es otro de los ejes que marcan el rumbo de la trayectoria de inserción” aseguró.

Señaló que existe una primera generación de migrantes que se desplazaron para mejorar su situación económica y calidad de vida, y derivado de ellos existe una segunda generación nacida ya en Estados Unidos, cuyos padres siguen siendo indocumentados. Sin embargo está la llamada generación 1.5 que migraron desde pequeños, acompañando a sus familias, también llamados dreamers indocumentados, que buscan en algún momento conseguir su ciudadanía.

Los dreamers a diferencia de sus padres y madres que crecieron, se educaron y pasaron de la niñez a la adultez en su país de origen, se han formado y construido social, cultural, políticamente dentro y fuera a la vez del sistema y la institucionalidad estadounidense, entre la escuela y la casa, entre el inglés y español, entre el español y la lengua indígena.

Son hijas e hijos de inmigrantes irregulares de primera generación, que llegaron con sus familiares e hicieron de Estados Unidos su país de residencia, en muchos de los casos, permanentemente de manera irregular.

Explicó que las personas retornadas son aquellas que anteriormente habían migrado y obligadas a regresar de manera forzada; así como aquellas que pudieron haber tomado la decisión por cuenta propia de retornar a sus países de origen.

La población de retorno enfrenta un choque cultural ante la estructura social del lugar a dónde retorna. Las y los jóvenes suelen enfrentar el estigma de la persona retornada como persona asociada a la criminalidad.

Las probabilidades de que las y los adolescentes se reinserten a la educación formal una vez que han migrado son muy limitadas; ya que aunque existen marcos regulatorios para el acceso a la educación, las políticas públicas suelen no incluir a esta población.

En cuanto a la población en tránsito, la migración representa el mayor punto de quiebre en la trayectoria educativa de las y los jóvenes. Independientemente de la edad y el último año cursado, la movilidad, en su mayoría de manera forzada y en condiciones muy precarias, además las y los expone a una serie de circunstancias que limitan de manera significativa las posibilidades de continuar estudiando.

Uno de los problemas más destacados en lugares de tránsito, es que la población migrante es flotante y eso impacta tanto en la planeación como en los materiales de enseñanza-aprendizaje.

En cuanto a los refugiados, en esta dimensión de la movilidad, las y los jóvenes piensan en la educación como otro rubro al que pueden regresar, otra forma en cómo su vida pueda volver a un curso estable; es decir que su expectativa es volver a la escuela y seguir con su trayecto educativo. Sin embargo, subsisten otros tipos de problemáticas a las que se enfrentan.

Por su parte el Lic. Óscar Dávila Carrasco señaló que uno de los principales retos en México para la niñez en migración, es reforzar a las procuradurías de atención de niñas, niños y adolescentes, además de ser necesaria la instalación de más albergues y capacitación a estas autoridades.

Realizó un esbozo del panorama legislativo nacional, mencionó la promulgación de la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes en 2014 que prevé:

·      Un enfoque garantista/de derechos (NNA como sujetos de derechos).

·      Disposiciones aplicables para todo el país. Establece lineamientos y criterios mínimos obligatorios que deben cumplir todas las autoridades.

·      Crea mecanismos institucionales para la garantía de derechos, entre estos el Sistema de Protección Integral de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes y Procuradurías de Protección.

·      Contempla la creación de las Procuradurías de Protección.

·      Establece principios rectores y la participación de niñas, niños y adolescentes en las decisiones que les afecten.

En 2020 se realiza la reforma a la Ley de Migración y de la Ley sobre Refugiados, Protección Complementaria y Asilo Político que:

·      Homologa criterios establecidos en la Ley General y que da cumplimiento a diversos tratados internacionales y recomendaciones.  Las NNA no permanecen en estaciones migratorias, se brindan alternativas de cuidado.

·      La determinación del interés superior lo realizan las Procuradurías de Protección.

·      Se extiende la visión de protección a toda niña, niño o adolescentes.

·      A toda NNA se le entrega un documento provisional de visitante por razones humanitarias, de manera que se garantice que las instituciones competentes tengan el tiempo de realizar una correcta determinación del interés superior.

“Cuando migras, llevas el sueño americano, pero al momento que te deportan  dejas muchas cosas en el país que ya construiste algo, principalmente la familia, en México existe discriminación y falta de oportunidades” compartió el C. Adán Jácome León integrante de la asociación Deportados Unidos en la Lucha, quien señaló la importancia de ayudar a la gente en movilidad a llegar a su destino.

Políticas públicas y Trabajo Social

El Trabajo Social incide directamente en las acciones gubernamentales y toma de decisiones de las políticas públicas, que son estrategias tendientes a la solución de problemas públicos, definidos y construidos a partir de una discusión en el espacio público, entre diversos actores, cada uno con una visión particular del problema, refirió el Mtro. Fernando Aguilar Avilés.

Al respecto destacó la importancia de que las políticas públicas contemplen la participación de la sociedad, así como de los diversos actores involucrados que permita una reflexión colectiva.

Destacó que desde el tema de las infancias y juventudes en migración, la disciplina de Trabajo Social representa una gran oportunidad al detonar procesos de cambio mediante los diagnósticos, estrategias y modelos de intervención, las cuales son insumos y herramientas para incidir en las políticas públicas en los diferentes niveles de gobierno, municipal, estatal y federal.

Para visualizar la sesión completa visita:

https://www.youtube.com/watch?v=WqGog8IuNyE