ACADEMIA

Segundo Seminario Permanente Emergencia Social Comunitaria

Estrategias Metodológicas en Emergencia Social Comunitaria y Artes Escénicas en el contexto de la pandemia Covid-19

El 26 de septiembre se llevó a cabo la sesión Proyectar un puente, comunidad y espacio público desde una mirada feminista, del seminario permanente Emergencia Social Comunitaria Estrategias Metodológicas en Emergencia Social Comunitaria y Artes Escénicas en el contexto de la pandemia Covid-19, el cual se realiza de manera virtual a través del canal de YouTube de la Escuela.

En esta mesa se contó con la participación de la Mtra. Laura Mariana Osorio Plasencia de la Facultad de Arquitectura, quien resaltó la importancia de cómo se vive y transitan de manera cotidiana los espacios a través de los cuerpos.

El espacio público es un lugar de encuentro ya sea de manera presencial o virtual en el que se interactúa con la arquitectura, se crean ambientes agradables u hostiles. “Es importante analizar cómo habitamos, usamos, transitamos y nos responsabilizamos de los espacios públicos para tejer un puente entre estos y la comunidad” señaló.

La arquitectura también refleja espacios de poder. “El androcentrismo nos ayuda a mirar cómo se crea lo urbano arquitectónico, cómo se proyecta y continúa colocando al centro las tareas, necesidades y demandas de los varones” aseguró.

Desde la mirada teórica feminista, se muestra como en la interpretación androcéntrica se presenta la exclusión de las mujeres. “Ha persistido la ausencia de conocer las necesidades y experiencias de la población femenina, así como una invisibilización de los aportes que han ido generando las profesionistas en la investigación de proyectos arquitectónicos” señaló.

Permanece la narrativa de que el espacio público es de los varones mientras que el espacio doméstico es el de las mujeres, es decir, el de proveedor económico y de la ama de casa, narrativas que se siguen viendo incluso en los medios de comunicación que el sistema patriarcal opera. “Durante la pandemia, se visibilizó aún más quienes ocupaban el espacio público y quienes se quedaban a atender a los hijos. La división de tareas y el uso del tiempo es desigual, existe una relación asimétrica jerárquica, lo que impacta directamente con el uso de los espacios” señaló.

“Nos vimos obligados a habitar lo virtual, lo mismo ocurre en los espacios públicos en el trabajo, escuela. Comenzamos a pasar un proceso de leer el lugar para habitarlo, y saber si nos genera seguridad o desconfianza” apuntó.

Refirió que existen límites materiales donde la experiencia de las mujeres pasa por la cocina, la casa, la iglesia, el mercado, lo que las invisibiliza de los espacios públicos.

Se debe pensar el espacio público desde la mirada feminista, para ello planteó revisar la violencia machista y la división sexual del trabajo, la doble jornada donde devienen los trabajos de cuidados, y el cómo se van integrando éstos al espacio urbano arquitectónico.

Comentó que, la violencia machista en el espacio público coloca limitaciones a las mujeres e inseguridad, como el transitar en horarios nocturnos, el uso del transporte público, la forma de vestir, tomar rutas alternas, es decir el espacio se vive diferente por la condición de género, la posibilidad de ser víctima hace que se construya el miedo al espacio.

Aludió que, los hombres realizan un movimiento pendular en el espacio de la vivienda al trabajo, usan el vehículo familiar; mientras que las mujeres un movimiento poligonal, de la vivienda a la escuela, al mercado, al empleo y usan el transporte público, por lo que se encuentran más expuestas a los delitos.

Las propuestas feministas señalan contemplar una arquitectura que contribuya a que las mujeres puedan habitar todos los espacios para asegurar una vida comunitaria. “La ciudad cuidadora, implica cuidar tu salud física y mental, permite integrar el trabajo de cuidados y a la vez posibilita el desarrollo en todas las esferas de la vida. Se tiene que pensar en la localización de espacios, en su diseño, generar espacios habitables, lo que representa una responsabilidad colectiva” finalizó.

Este espacio académico es coordinado por la Mtra. Leticia Cano Soriano, coordinadora del Consejo Académico del Área de las Ciencias Sociales (CAACS) y profesora de carrera de la ENTS; el Dr. Pedro Isnardo de la Cruz, técnico académico de la ENTS; y la Mtra. Aris Paulina Pretelin Esteves, profesora de la Facultad de Filosofía y Letras.

Para visualizar la sesión completa visita:

https://youtu.be/TvQQ3so4_G8