ACADEMIA

La desaparición de personas también es un problema social

La desaparición de personas es un fenómeno social que está presente en la vida cotidiana, además es un fenómeno delincuencial, contemporáneo y complejo que requiere de trabajo conjunto entre el Estado, instituciones, y la sociedad civil para generar un sistema de búsqueda más eficiente, además de científicos sociales que a través de la intervención social orienten la investigación para comprender esta problemática, así lo refirieron especialistas en el panel La desaparición de personas también es un problema social realizado el 3 de septiembre en la Escuela Nacional de Trabajo Social, en el auditorio Dr. Manuel Sánchez Rosado.

En este espacio en el que se congregó academia, instituciones públicas y sociedad civil para el análisis, estuvieron presentes el Mtro. Enrique Camargo Suárez, Comisionado de Búsqueda de Personas de la CDMX; el Dr. Ulises Lara López, docente de la Escuela Nacional de Trabajo Social y vocero de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México; María Elena Solís Gutiérrez, presidenta de la Asociación Mexicana de Niños Robados y Desaparecidos A.C. (AMNRD), así como el Dr. Pedro Isnardo De la Cruz Lugardo, técnico académico, quien participó como moderador de la mesa.

El Mtro. Enrique Camargo Suárez, informó que en México desde el 15 de marzo de 1964 a la fecha se tienen 260 mil reportes de personas desaparecidas, de las cuáles han sido localizadas 150 mil.

Informó que el rango de edad de las personas desaparecidas actualmente oscila para mujeres entre los 10 y 24 años, mientras que en los hombres es de 19 a 34 años, ya sea con fines de trata o explotación sexual, panorama completamente distinto con relación a años pasados donde las desapariciones eran en su mayoría de niñas y niños con fines de adopción ilegal.

Señaló que, una desaparición se refiere a la ausencia de la que alguien se percata, es decir, cuándo la desaparición es inusual. Subrayó que en la Ciudad de México las desapariciones pueden reportarse a las autoridades de inmediato para iniciar la búsqueda, ya sea a la Comisión de Búsqueda de Personas de la Ciudad de México o a la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México; a diferencia de los estados de la República, donde deben transcurrir 72 horas para reportar una desaparición.

Refirió que, ante las desapariciones las causas son familiares, sociales o individuales por lo que es necesario tomar en cuenta estos ámbitos y mantener contacto constante con familiares y amigos.

El Dr. Ulises Lara López enfatizó que las desapariciones son un problema social, que comenzaron siendo un problema político por oposición, apuntó que en un segundo momento las desapariciones son un fenómeno delincuencial masivo, que tiene relación con la llamada guerra al narco, donde se comienzan a ver “las desapariciones forzadas a manos de particulares ya no del Estado sino de grupos amparados bajo el Estado, con una orientación distinta, como trata de personas con fines de explotación para sembrar, producir, trasiego de drogas, explotación sexual o cualquier otra actividad delictiva” dijo.

Señaló que la falta de atención a estos delitos provocó que fueran las familias y no el Estado quien se dedicara a buscar a las personas que habían sido extraídas de manera brutal de su núcleo social, secuestradas y asesinadas.

“Las desapariciones son un fenómeno delincuencial, pero también es social porque está presente en la vida cotidiana, que las personas puedan ser sustraídas, desaparecidas por particulares, pero también puedan declararse ausentes de sus núcleos internos sociales, debemos reconocerlos como fenómenos sociales, sino lo hacemos seguiremos pensando que es un asunto individual” expresó.

Especificó que la desaparición se convierte en un problema cuándo la percepción de que alguien está ausente pueda ser víctima de algún delito. “La violencia se volvió generalizada, el riesgo se convirtió en algo inmanente” apuntó.

Explicó que, como parte de esta problemática comenzaron a ocurrir otros fenómenos sociales como la sustracción de niños en parejas divorciadas por la confrontación de los padres, prácticas asociadas a la violencia vicaria. Acotó que el suicidio también es una preocupación social, de aquellas personas que no tienen la capacidad de resolver sus conflictos y que suelen tomar como una opción más la ausencia voluntaria, para escapar de sus entornos conflictivos violentos o de pobreza.

El fenómeno migratorio es un fenómeno económico y político que también pone a las personas en riegos de desaparición. Derivado de todos aquellos factores que intervienen en esta problemática social, “las desapariciones son un fenómeno complejo que requiere de soluciones complejas, de trabajo institucional” indicó.

Opinó que se requieren de mayores herramientas, pues aunque se cuenta con la Clave Única de Registro de Población (CURP), así como un banco de ADN, son necesarios registros de biométricos, para una identificación más eficiente siempre con un uso socialmente responsable.

“Debemos construir una sociedad que se preocupa por el otro, ante un problema contemporáneo. Hay una necesidad de un sistema más eficiente de búsqueda, de contar con instrumentos. Se debe educar desde las escuelas, de reconocerse con respeto al otro, una sociedad que construye paz, tarea que apenas comienza a trabajarse para disminuir sustantivamente las ausencias. En este problema de carácter social se deben buscar soluciones de manera conjunta para construir en un esfuerzo colectivo, optimizar los sistemas, reducir la violencia y mejorar las relaciones sociales” mencionó.

Por su parte el Dr. Pero Isnardo de la Cruz Lugardo, añadió que el tema de las desapariciones tiene diversas trayectorias, hay procesos de búsqueda que implican desplazamientos de poblaciones enteras. “Organismo internacionales se están dando cabida en problemáticas nacionales para conjuntar esfuerzos que desde la sociedad se impulsan, evitar impunidad en estos delitos, y lograr que las familias se reencuentren con los suyos. La fragmentación social y ausencia de un tejido social-humanitario requiere de una construcción de paz, con una causa común. México vive una guerra silenciada, las desapariciones no son un fenómeno aislado, los esfuerzos de las instituciones, los gobiernos, la academia, la sociedad civil deben ser visibilizados” subrayó el Dr. Pedro Isnardo de la Cruz Lugardo.

En su oportunidad María Elena Solís Gutiérrez, presidenta de la Asociación Mexicana de Niños Robados y Desaparecidos A.C. (AMNRD) brindó algunos consejos como: enlazar la telefonía con otra persona, así como mantener una comunicación, verificar que las cámaras de las colonias estén en correcto funcionamiento o reportarlas en caso contrario, no permitir a los menores de edad el uso excesivo de las redes sociales, un canal recurrente del narcotráfico.

Apuntó que en 2009 las niñas y niños eran robados para adopciones ilegales y actualmente el mayor porcentaje de desapariciones son de jóvenes. Agregó que debido a las desapariciones nacieron los colectivos y en 2017 con el impulso de las familias de personas desaparecidas y de la sociedad civil, se creó la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas.

Mencionó que, la asociación que encabeza coadyuva con las autoridades e instituciones correspondientes en la búsqueda y localización de personas, además de brindar un acompañamiento en temas jurídicos y psicológicos a los familiares.

Añadió que con las asociaciones y la sociedad civil se está impulsando un proyecto iniciado en Coahuila, denominado Centro Regional de Identificación Humana, dedicado a recolectar y estudiar el AND, para que sea una herramienta a nivel nacional que abone a la búsqueda de personas.

Finalmente el Dr. Ulises Lara López concluyó que una búsqueda no caduca, “continúa” y los datos básicos así como de información sustantiva, y las 72 primeras horas son fundamentales en una búsqueda.

Se demanda de científicos sociales que orienten las investigaciones con estudios de fondo, que se realicen campañas de solidaridad, empatía, de reeducación en escuelas sobre “si algo pasa avisa”, de una comunicación asertiva para niñas, niños y adolescentes sobre la protección y la confianza, así como de mejores sistemas de información que mantengan la privacidad en los datos, “colaboremos para construir un Estado social que proteja a sus ciudadanos” finalizó.

Para reportar alguna desaparición:

Comisión Búsqueda de Personas de la Ciudad de México

Teléfonos: 5591314605, 5571980551 y 5574688400

Facebook: Comisión de Búsqueda de Personas CDMX

Instagram: @cbusquedacdmx

Twitter: @busqueda_cdmx

Comisión Nacional de Búsqueda

Teléfono: 55-13-09-90-24

Fiscalía de Investigación y Persecución de los Delitos en Materia de Desaparición Forzada de Personas y la Desaparición Cometida por Particulares y Búsqueda de Personas Desaparecidas (FIEIDEPFP)

Teléfonos: 53 45 50 67 y 53 45 50 84

Para visualizar el panel completo visita:

https://www.youtube.com/watch?v=e1swYFSz3WY