ACADEMIA

Mesas de experiencias profesionales: Reconfiguración del ejercicio profesional

Ante las complejas realidades, las desigualdades profundizadas por la pandemia y las múltiples problemáticas, Trabajo Social se ha posicionado como una profesión medular para la creación e intervención en los procesos de cambio social.

Sin embargo, los contextos sociales cambiantes interpelan a las trabajadoras y trabajadores sociales a repensar su forma de intervenir. Una reconfiguración del ejercicio profesional en Trabajo Social requiere de profesionalización, especialización, fortalecer redes multi e interdisciplinarias, incorporar la interseccionalidad, ubicarse laboralmente en espacios de toma de decisión, así como priorizar en cualquier campo de acción el enfoque de derechos humanos y la perspectiva de género.

Así lo reflexionaron las y los académicos participantes en las Mesas de experiencias profesionales: Reconfiguración del ejercicio profesional, como parte de las actividades de la Jornada Académica Cultural en Conmemoración del 21 de agosto, Día Nacional de las y los Trabajadores Sociales.

En estas mesas realizadas el 24 y 27 de agosto en el auditorio Dr. Manuel Sánchez Rosado, participaron en un primer grupo la Mtra. Berenice Vargas Ibáñez del Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (COPRED); la Mtra. Rocío Saldaña García de Fundación Santander y el Mtro. Francisco Rodríguez Ramos, profesor de la ENTS.

La segunda mesa estuvo integrada por el Mtro. Francisco Gabriel González Gutiérrez de la Defensoría Pública; la Mtra. Isabel Camacho Cazares especialista en el tema de migrantes en Estados Unidos; y la Mtra. Amira Elena Hernández Juárez, del área de la salud, trabajadoras y trabajadores sociales en ejercicio, quienes laboran desde diferentes espacios de intervención del Trabajo Social.

El objetivo de estas charlas fue compartir experiencias con el alumnado, y mostrar el amplio panorama de las áreas de acción en las que Trabajo Social participa desde las instituciones públicas, privadas, organizaciones o asociaciones, sociedad civil, en temas de cultura, salud, educación, migración, sustentabilidad, jurídico, siendo pieza medular generadora de modelos de intervención y de procesos de cambio social.

Retos para Trabajo Social

Los panelistas coincidieron que para ejercer Trabajo Social se debe contemplar a los derechos humanos como columna vertebral, en todos los ámbitos en los que se encuentre y en cualquier intervención que se realice, así como el enfoque de perspectiva de género para las políticas públicas y acciones que se determinen desde cualquier espacio.

Agregaron que la atención a la salud mental, agravada por la pandemia, es un área de oportunidad para las y los trabajadores sociales, no se tienen políticas públicas al respecto y es un tema necesario de atender.

La interdisciplinariedad es fundamental, la relación con otras profesiones, además se requiere de un trabajo colaborativo entre instituciones gubernamentales, sociedad civil, academia, ámbito privado para lograr una atención integral, explicó la Mtra. Berenice Vargas Ibáñez del COPRED.

"Veamos los retos como oportunidades, somos científicos de una disciplina que se debe aplicar, necesitamos darle un valor importante a la investigación, especializarnos, ver donde está nuestra pasión y cuáles son las limitaciones, no somos trabajo asistencial, tenemos un deber ser que implica implementar nuevas formas de intervención y programas de prevención, trabajamos con gente y la gente cambia constatemente, vivimos en una cultura que se modifica. Necesitamos investigar y saber dónde están las problemáticas, reestructurarnos y repensarnos desde la experiencia, de qué manera seguimos avanzando, así como colaborar en equipo, respetar a las otras profesiones y trabajar junto con ellas" subrayó la Mtra. Isabel Camacho Cazares.

Reconfiguración de la experiencia profesional

La visibilización de la desigualdad obliga a la reconstrucción social con perspectiva de inclusión, misma que debe tomar en cuenta la interseccionalidad, así como la participación activa de las poblaciones que es fundamental para el diseño de propuestas, acciones y estrategias.

La incorporación de la interseccionalidad es necesaria para reconocer que las desigualdades sistémicas se configuran a partir de la superposición de diferentes factores sociales, se debe prestar atención al conjunto de relaciones de poder que afectan, incluidas aquellas fuerzas a nivel macro y micro, es decir cada sujeto social tendrá experiencias diferentes.

La Mtra. Berenice Vargas agregó que, las y los trabajadores sociales deben repensar el rol y vigencia de sus aportes, la especificidad y complementariedad profesional frente a retos complejos e interdisciplinarios; además de evaluar el nivel de manejo tecnológico para hacer frente a las nuevas condiciones, así como revisar la postura crítica, ética y política frente a los acontecimientos mundiales.

Resultados desde las prácticas escolares

Desde la voz de la docencia, las y los participantes consideraron importante continuar con la formación social, el análisis de las realidades, de los constantes cambios que demandan a las y los profesionales de Trabajo Social a repensar su ser y hacer, construir en colectivo, innovar, generar nuevas posibilidades de intervención.

Se expuso parte del trabajo realizado por parte de alumnas y alumnos de prácticas de especialización de la ENTS, que han desarrollado experiencias de difusión de la cultura mediante la vinculación a procesos sociales para la reconstrucción del tejido social, economías alternativas, promoción de la cultura a través de talleres, exposiciones, eventos masivos.

Actualmente se considera a la cultura como un pilar para el desarrollo, al lado de la salud pública, el bienestar, la diversidad, la inclusión, la accesibilidad, el crecimiento económico y el equilibrio ambiental. Los aportes de los grupos de prácticas han sido a través de investigaciones relativas a estudios de consumo, infraestructura, ofertas culturales, diagnósticos, proyectos de intervención socio-artística, trabajos que han visibilizado las dinámicas sociales de los pueblos tradicionales, las colonias populares y las unidades habitacionales de la región de Tláhuac. El estudio de las regiones y localidades ha sido básico para comprender el impacto que los programas y políticas culturales pueden lograr en las comunidades, como la articulación de redes y recuperación de los procesos de gestión comunitaria, organización de colectivos vivos, para apostar a una intervención hacia los espacios locales, y coadyuvar en las políticas culturales compartió el Mtro. Francisco Rodríguez Ramos.

Los ponentes coincidieron que algunas de las problemáticas profundizadas con la pandemia, urgentes de atender son: la orfandad, salud mental, retraso y deserción educativa, secuelas de la enfermedad de COVID-19, la permanencia del virus, así como las múltiples desigualdades entre las poblaciones.

Al término de las mesas las y los panelistas exhortaron al alumnado a encontrar su pasión, especializarse, investigar, sistematizar, incrementar competencias y ocupar espacios de toma de decisión en las diferentes instituciones para seguir visibilizando a la profesión y con ello fortalecer a la disciplina, “Es el momento de Trabajo Social”.