Para este recital de fin de grado he seleccionado tres obras que, en conjunto, representan distintos estilos, épocas y enfoques técnicos e interpretativos dentro del repertorio clarinetístico.
Capricho Pintoresco. Miguel Yuste
Miguel Yuste fue una figura fundamental en la historia del clarinete en España, tanto como intérprete, pedagogo y compositor. Su obra refleja un profundo conocimiento del instrumento y un estilo muy ligado al romanticismo tardío, con un claro carácter nacionalista. El Capricho Pintoresco es una muestra representativa de su producción: combina melodías expresivas con secciones de gran virtuosismo técnico, integrando giros melódicos de carácter español. Esta pieza permite al intérprete explorar la expresividad y agilidad del clarinete, al tiempo que rinde homenaje a una figura clave del repertorio español.
Rapsodia para clarinete solo. Giacomo Miluccio
De estética más contemporánea, esta rapsodia propone un discurso libre y cargado de contrastes, jugando con la riqueza tímbrica del clarinete. Exige un control absoluto del sonido y la articulación, a la vez que invita a una interpretación personal e introspectiva.
Sonata para clarinete y piano. Francis Poulenc
Una de las piezas más importantes del siglo XX para esta formación, combina ironía, lirismo y energía. La obra requiere una gran compenetración entre clarinetista y pianista, y plantea retos expresivos muy ricos, desde la melancolía del primer movimiento hasta la vitalidad rítmica del último.
Estas tres piezas conforman un programa equilibrado y exigente, desde repertorio típico del instrumento como lo es la Sonata de Poulenc, pasando por repertorio español y de gran virtuosismo así como lo es el Capricho Pintoresco de Yuste, hasta llegar a una pieza para clarinete solo, como lo es la Rapsodia de Miluccio, pudiendo a través de ella demostrar lo flexible que puede llegar a ser la técnica del clarinete mediante la personalidad del clarinetista.