Romanzas para oboe y piano, Op. 94. R. Schumann (1849)
Las Romanzas para oboe y piano, Op. 94, son una obra de música de cámara compuesta por Robert Schumann en diciembre de 1849 y publicada en 1851. Esta pieza, que es la única composición de Schumann para oboe, consta de tres movimientos: Nicht schnell, Einfach, innig y Nicht schnell. Cada uno de estos movimientos presenta un carácter lírico y expresivo, reflejando la profunda sensibilidad romántica del compositor. La obra fue escrita durante un período de gran creatividad para Schumann.
Cuarteto para oboe y cuerdas en fa mayor, K. 370. W. A. Mozart (1781)
El Cuarteto para oboe y cuerdas en fa mayor, K. 370, fue compuesto por Wolfgang Amadeus Mozart a principios de 1781. Orquestado para oboe, violín, viola y violonchelo. La obra se estructura en tres movimientos: Allegro, Adagio y Rondeau: Allegro, y es reconocida por su brillantez y la habilidad con la que Mozart integra el oboe con el conjunto de cuerdas, creando un equilibrio perfecto entre los instrumentos.
Sonata para oboe y piano, FP 185. F. Poulenc (1962)
La Sonata para oboe y piano, FP 185, es una de las últimas obras compuestas por Francis Poulenc, escrita en 1962 y dedicada a la memoria de Serguéi Prokófiev. Esta sonata es la última de las tres sonatas que Poulenc escribió para instrumentos de viento y se caracteriza por su estructura en tres movimientos: Elégie (Paisiblement, Sans Presser), Scherzo (Très animé) y Déploration (Très calme). El último movimiento, Déploration, es particularmente significativo, ya que se cree que fue la última pieza que Poulenc escribió antes de su muerte, sirviendo como una especie de obituario musical.
Concierto en Sib Mayor. A. Vivaldi
Antonio Vivaldi (1678-1741) fue un compositor y violinista italiano del Barroco. Vivaldi compuso muchas de sus obras para el conjunto musical femenino del Ospedale della Pietà, el cual era un convento, orfanato y escuela de música en Venecia, en donde él estuvo trabajando como profesor de las intérpretes femeninas. En total Vivaldi compuso 39 conciertos para fagot, todos ellos compuestos para el orfanato. De esta forma, el fagot es el segundo instrumento, detrás del violín, para el que compuso más conciertos solistas.
El Concierto en Sib Mayor para fagot y orquesta es uno de estos conciertos. Es una de las obras más destacadas dentro del repertorio para fagot compuesto por Vivaldi. El concierto consta de tres movimientos: Allegro, Largo y Allegro. El primer movimiento presenta un tema vigoroso y enérgico, el segundo movimiento ofrece un contraste emocional con una melodía lírica y expresiva, y el tercero es un movimiento rápido y animado
Andante y rondó húngaro. C. M. v. Weber
El Andante y Rondó Húngaro es una obra para fagot y orquesta compuesta por Carl Maria von Weber (1786-1826), uno de los principales representantes del Romanticismo musical alemán. En un primer lugar el concierto fue escrito para viola, sin embargo, poco después se editó para fagot solista y se publicó esta nueva versión en primer lugar.
La obra está formada por dos movimientos, un andante inicial de carácter melancólico y emotivo, y un rondó más enérgico y vivaz. Es en este segundo movimiento donde se pueden observar más las características de la música folclórica húngara, como ritmos sincopados, escalas cromáticas y motivos melódicos vivaces. A lo largo de la obra el fagotista interpreta diversos pasajes virtuosos, con los cuales muestra su habilidad técnica y agilidad.
Concertino en Sib Mayor. F. David
El Concertino en Sib mayor para fagot solista y orquesta es una obra de estilo romántico destacada dentro del repertorio para fagot. La obra está compuesta por Ferdinand David (1810-1873), un violinista y compositor alemán. Una de las características más notables de la obra es su equilibrio entre su carácter melódico y su virtuosismo técnico.
El concertino es una obra en un solo movimiento, aunque se puede dividir en cinco secciones distintas. La pieza comienza con una introducción lenta y expresiva, la cual da paso a la parte principal del concierto, que es más animada y virtuosa. A continuación tiene lugar otro fragmento expresivo y emotivo. Posteriormente se vuelve a repetir la segunda sección, y esta da paso a una variación de la tercera sección. La obra termina con un pasaje de tempo más rápido y virtuoso.