Sonata in E Major for Flute and Piano BWV 1035 J.S. Bach
Voy a interpretar los tres primeros movimientos de esta sonata (Adagio ma non tanto, Allegro y Siciliano). Es una de las obras más populares dentro del repertorio de la flauta travesera. Esta obra destaca sobre todo por su elegancia, y por el virtuosismo que requiere de quien la interpreta, debido a su complejidad técnica.
El primer movimiento es el más sereno. Es tranquilo, pero la tonalidad mayor le da un aire alegre. Es muy importante la interpretación del flautista.
El segundo movimiento es el más enérgico de los tres. Tiene un tempo más rápido, y es donde más destaca la técnica del intérprete, ya que el movimiento completo contiene pasajes difíciles de semicorcheas muy seguidas, sin ningún momento de descanso. Para el intérprete es difícil de compaginar todos estos pasajes con sus respectivas articulaciones,
adornos y cortas respiraciones que deben durar frases muy largas. Sin embargo, es un movimiento precioso y muy emocionante tanto de escuchar como de interpretar.
Por último, Siciliano es un movimiento aparentemente corto y tranquilo. Juega con la alternancia de notas cortas picadas con ligaduras grandes. Destacan las alteraciones en él.
No es un movimiento para mostrar virtuosismo técnico, ya que ese ha dado mucho de sí en el Allegro. En cambio, es un fragmento muy delicado, al cual hay que dedicarle la máxima expresividad.
Cantabile and Presto. Enesco
(Obra a interpretar de memoria) Esta obra se compone de dos partes muy bien diferenciadas. La primera es la más libre. Tiene muchas variaciones de tiempo según cómo lo interprete cada flautista. Combina el registro tanto grave como agudo. No es una obra rápida. Al contrario, multitud de pasajes son más lentos con la intención de pasar por cada
una de las notas, mostrando lo bonita que es la obra, y para disfrutarla más. Destaca muchísimo la dualidad del piano con la flauta, haciendo sonar esta primera parte como si fuese magia. De hecho, acaba con una nota sobreaguda tendida, en un matiz piano, lo que confirma la expresión tan delicada de este fragmento.
La segunda parte rompe totalmente con esta dulzura. Es un movimiento mucho más rápido, más fuerte. Se escuchan multitud de notas a la vez, y de pasajes tanto de la flauta como del piano a la vez. Este movimiento requiere mucha compenetración entre la flauta y el piano, ya que es un acompañamiento que el oído no está acostumbrado a escuchar, con muchos contratiempos, entradas a destiempo...
Es de una expresividad muy potente y dura, y destacan mucho los pasajes rápidos de la melodía, mostrando mucho virtuosismo. La obra en conjunto es impresionante, tanto Cantabile como Presto.
Fantasie Pastorale Hongroise François Doppler
Esta obra es espectacular por la cantidad de sentimientos que aborda a lo largo de toda ella. Tiene un carácter flamenco al principio, el cual es increíble de interpretar, pues como flautista, puedes mostrar una técnica impecable a la vez que un sonido grande y resonante.
Alcanza notas tenidas sobreagudas, donde el flautista demuestra sus capacidades en cuanto a sonido. Lo mismo pasa en cuanto a la técnica, ya que la obra entera se compone de multitud de pasajes que lo permiten.
La obra evoluciona en cuanto a expresión y carácter, y aunque no esté dividida en movimientos concretos, el público, con escuchar la obra una vez, es capaz de diferenciar bien las partes que se seccionan.
Comienza con un tono misterioso, y como ya he dicho, de carácter flamenco, lo que caracteriza muy bien a esta obra como una fantasía. A medida que avanza la obra, se va alcanzando un tempo más rápido, mayor virtuosismo, y mayor tensión. El final de la obra es un punto culminante. Además de toda la energía acumulada anteriormente, se va generando cada vez más tensión, que no va a ser liberada hasta la última nota de todas, la cual tiene tantos sentimientos acumulados que deja con los pelos de punta.