Conocimiento
Nivel educativo
Educación Secundaria Obligatoria.
Descripción
Esta actividad consta de varias partes bien diferenciadas:
La primera parte de la actividad está destinada a relacionar nuestro modelo de vida con las emisiones de CO2 y, por lo tanto, con la problemática del cambio climático (vídeo, relación de actividades emisoras, etc.).
La segunda parte de la misma se centra en el cálculo de emisiones de CO2 que se derivan del desplazamiento al centro por parte del grupo (en un curso).
A partir de este dato, se establecen una serie de medidas posibles para reducir la cantidad de CO2 emitido para acudir al centro (mitigación).
Finalmente, como medida compensatoria, se plantea llevar a cabo una reforestación que consiga compensar las emisiones calculadas, siempre presentando esta acción como complemento a la mitigación.
Planteamiento general
Cuando se trabajan las problemáticas ambientales buscando soluciones desde el plano educativo, se entiende que la acción directa de intervención a favor del medio ambiente es una de las mejores herramientas para motivar un cambio de actitud más favorable hacia nuestro entorno. Intervenir directamente a favor del clima pasa por reducir y equilibrar nuestras emisiones de gases efecto invernadero y sobre todo del gas que más emitimos, el CO2.
Con esta actividad se pretende trabajar las medidas de reducción (tras realizar el cálculo de lo que emitimos) y se propone compensar esas emisiones (equilibrarlas) mediante la plantación de árboles que absorban CO2 atmosférico.
Los océanos, los suelos y la vegetación son los elementos capaces de absorber de la atmósfera el CO2, constituyen lo que se llaman sumideros. En el caso concreto de las plantas, absorben dióxido de carbono gracias a la fotosíntesis, proceso por el que este gas queda fijado en sus raíces, tronco y hojas.
Realizar una plantación con vegetación mediterránea, como plantea esta actividad, no sólo contribuirá a paliar el problema del cambio climático, sino que también va a reportar otros beneficios ambientales. Plantar árboles que absorban CO2 atmosférico es a su vez crear espacios para la biodiversidad natural, es evitar la pérdida de suelo, es proyectar zonas de recreo para el encuentro social y un largo etcétera de beneficios.
La compensación de emisiones de CO2 mediante la plantación no se muestra en ningún caso como alternativa a la reducción, sino como complemento de ésta, y una vez emprendidas las medidas para reducir las emisiones en el centro. Este aspecto, es importante desde el punto de vista educativo, ya que no se trata de dar la sensación de que se puede emitir cuanto se quiera para luego compensar.
Objetivos
• Establecer relaciones entre nuestras acciones y las consecuencias ambientales de las mismas.
• Conocer la importancia de los sumideros de CO2, especialmente los bosques, para el equilibrio de gases efecto invernadero en la atmósfera.
• Intervenir favorablemente en el medio, mediante la plantación colectiva de especies autóctonas.
Desarrollo
Tras presentar la actividad, lo primero será justificar nuestra implicación en la solución al cambio climático. Para ello, se propone ver el vídeo Cambio climático en el que de forma sencilla se concreta qué es el cambio climático, sus causas, sus consecuencias y algunas de las medidas para su mitigación.
https://www.youtube.com/watch?v=kcr-Ryq6Nrk
Una vez proyectado el audiovisual se pide al alumnado que, por grupos, piensen en actividades cotidianas que generen CO2. Se comentan las aportaciones de los grupos y se completa una lista común con actividades emisoras. Seguramente saldrán actividades como los desplazamientos hasta el centro, enchufar un aparto eléctrico o encender la luz. ¿Qué cantidad de CO2 se genera con estas actividades?
Se realizará un trabajo de investigación que permita saber qué cantidad de CO 2 se emite en clase en un curso escolar Para centrar el trabajo se hace la investigación sobre el desplazamiento diario al centro, aunque también se podría calcular lo que se emite debido al consumo de electricidad o papel, y/o de los residuos que se generan.
Se divide a la clase en cuatro grupos de trabajo. Cada grupo se encargará de hacer el estudio entre sus componentes. En primer lugar cumplimentar la ficha A, en el que se calculan los kilómetros realizados por cada alumno o alumna en función del desplazamiento concreto (durante un curso). Con los datos del alumnado participante, se rellena la primera parte de la ficha B y se muestran los datos, para analizar en clase cuál ha sido el medio de transporte más utilizado y por qué.
Para convertir los kilómetros de cada medio de transporte en emisiones se pueden utilizar varias herramientas:
• Calculadoras de CO2 (como la que se encuentra en la página Web www.ceroco2.org
• Factores de conversión con los que realizar simples reglas de tres (Ficha C).
Con los datos resultantes se completan las emisiones en la segunda parte de la ficha B. Es importante trabajar después, qué implican dichas emisiones, para poder establecer un vínculo entre nuestras acciones y las consecuencias de éstas. Los chicos y las chicas deberán comprender que nuestras emisiones contribuyen a aumentar el efecto invernadero y que este aumento genera una subida de la temperatura media del planeta que tiene como consecuencia variaciones en los climas de la Tierra.
Continúa la actividad planteando la búsqueda de posibles soluciones: ¿qué podemos hacer para minimizar nuestro impacto ambiental como consecuencia del transporte? La respuesta pasa por reducir y equilibrar nuestras emisiones de CO2. Entre todos y todas se configura una lista de medidas que nos ayuden a reducir; ir en bici o compartir coche, puede ser algunas de ellas. La lista quedará expuesta en el aula, abierta a poder ser ampliada por los alumnos y alumnas cuando se les vayan ocurriendo nuevas acciones.
Por último, y como medida para equilibrar nuestras emisiones, se plantea una plantación en el patio del centro o en algún espacio cercano a la localidad (parque urbano, espacio natural, espacio protegido o lugar emblemático para el alumnado). Antes de comenzar los preparativos de la plantación (escoger el lugar, hablar con la administración competente para pedir permiso, organizar las herramientas, organizar el riego, etc.), se debe dar a conocer cómo funciona el efecto sumidero de los árboles entre nuestros alumnos y alumnas. En la ficha D se recogen las tablas en las que se muestra la absorción anual de CO2 de algunas especies arbustivas, una vez que estas especies han adquirido cierto porte. Aprovechando estas tablas (se pueden también plantear supuestos: ¿cuánto CO2 absorberá nuestra plantación cuando los árboles alcancen el porte indicado?,¿cuántos árboles del porte indicado se necesitan para compensar las emisiones de todos nuestros desplazamientos al centro?
Si un coche emite 15 kg de CO2 en 100 kilómetros, ¿cuántos alcornoques de este porte se necesitan para absorber el CO2 que emite ese vehículo en 1.500 kilómetros?
Los datos expresados en las tablas del anexo 16 sobre medidas y edades son orientativos. En esta actividad por encima del valor puramente técnico prima el valor educativo.
Requisitos y materiales
• Vídeo
• Fichas A, B, C y D.
• Azadas, papel y lápices.
• Factores de cálculo o calculadora de emisiones.
Temporalización
La actividad puede ser llevada a cabo en el transcurso de un mes desde que se plantea el cálculo de emisiones hasta que se realiza la plantación. Las estaciones aptas para la plantación son otoño y primavera, según las condiciones climáticas de la zona y las especies que se vayan a plantar.
Principales competencias clave que se trabajan
CCL, CMCT, CAA, CSC
ENLACE TABLAS TAREA 1
Cálculo de emisiones del centro
Mientras se desarrolla la sensibilización o una vez terminada ésta, la comisión de seguimiento realiza un cálculo cuantitativo de las emisiones del centro, correspondientes al curso anterior, utilizando las fichas 1, 2, 3 y 4 del anexo 3.
Cálculo de las emisiones de CO2 debidas al consumo de electricidad. Ficha 1. Ficha para el cálculo de emisiones de electricidad.
Cálculo de las emisiones de CO2 debidas al consumo de combustible en calefacción. Ficha 2. Ficha para el cálculo de emisiones en calefacción.
Cálculo de las emisiones de CO2 debidas al consumo al transporte. Ficha 3. Ficha para el cálculo de emisiones en transporte.
Cálculo de las emisiones de CO2 debidas al consumo de papel. Ficha 4. Ficha para el cálculo de emisiones por el consumo de papel.
En una segunda sesión de trabajo se pondrán en común los datos obtenidos. El coordinador o coordinadora se encargará de recogerlos, agruparlos y completar el Documento resumen de resultados en la ficha 5 de esta guía, y distribuirlo en el claustro del profesorado y por todas las clases para dar conocimiento de estos datos a toda la comunidad educativa.
Los centros realizarán el cálculo de emisiones del curso anterior posteriormente a la constitución de la comisión de seguimiento, una vez que hayan recabado la documentación correspondiente para poder realizarlo (facturas de consumo de luz, combustible, papel, etc).
b) Investigar dónde y cómo reducir
Se trata de averiguar desde un punto de vista más cualitativo dónde se producen las emisiones en el centro y sus causas una vez que sabemos, por la cuantificación realizada por la comisión de seguimiento, cuánto emitimos. Se contará con la participación del alumnado.
A través de este proceso se debe dar respuesta a: ¿Con qué actividades de las desarrolladas en el centro se producen emisiones? ¿Cómo se pueden evitar o reducir estas emisiones?
Para conseguirlo, se propone realizar una investigación basada en los comportamientos ambientales tanto del alumnado como del profesorado. Y consistirá en:
Se explicarán en clase los objetivos y la metodología que se va a emplear en el desarrollo de la actividad.
Se entregará a cada alumno o alumna la ficha 6 sobre la observación de comportamientos ambientales en el centro. Cada alumno o alumna anotará a lo largo de la semana al menos, tres prácticas ambientales negativas en el centro.
Puesta en común en la que se recogen todas las prácticas, se organizarán por categorías, uniendo las que sean similares e identificando comportamientos mejorables desde el punto de vista ambiental.
Se recogerán las propuestas de mejora, y de esta forma se irá confeccionando un listado de acciones para disminuir las emisiones del centro, que se reflejará en la ficha 7 Resumen de propuesta de compromisos del aula.
Los resultados obtenidos en cada grupo clase se entregarán al profesor o profesora que coordina el programa.
c) Propuestas de reducción
La comisión de seguimiento con las propuestas realizadas por cada grupo clase, por el profesorado a nivel particular, y por el resto de componentes de la comunidad educativa, elaborará un decálogo (ficha 8) con los compromisos que va a asumir el centro, para conseguir de forma efectiva la reducción de emisiones de CO2.
Este listado de medidas de reducción o decálogo, será el documento de compromiso de reducción del centro, que tras su aprobación por el Consejo Escolar, se difundirá en todas las aulas y a toda la comunidad educativa, de forma que se pueda revisar periódicamente y reflexionar con el alumnado sobre el grado de cumplimiento de las propuestas.
Las acciones de reducción se llevarán a la práctica por todos los sectores de la comunidad educativa y durante al menos un curso completo antes de volver a realizar la cuantificación de emisiones y comprobar si hemos conseguido reducir las emisiones poniendo las acciones del Decálogo en marcha.