Hoy en día los profesionales de la abogacía son conscientes de las ventajas que la tecnología puede aportar a su actividad. En gran medida, esto se debe a que cada uno de nosotros, como ciudadanos y consumidores, hemos incorporado las nuevas tecnologías en nuestras vidas, aprovechando los beneficios que nos brindan.
Como profesional jurídico, su papel será doble: por un lado, conocer el marco jurídico de los fenómenos digitales, cómo afecta a tu empresa y a tus clientes; y, por otro, estarás en condiciones de aplicar la tecnología con el objetivo de optimizar tus procesos y actividades, beneficiándose así de las ventajas de la digitalización.
Por ello resulta imprescindible una formación que les acerque, en un sentido amplio e integral, a lo digital, y les proporcione herramientas prácticas para analizar las necesidades de su despacho y elaborar la mejor estrategia posible.
MÉTODO
Los pasos a seguir dentro del área
COHERENCIA
Tiene en cuenta las implicaciones de todo tipo
CREATIVIDAD
La esencia de la innovación